Vecinos de El Refugio en Santiago Tlacotepec al sur de la capital mexiquense, piden ayuda a las autoridades para rescatar árboles enfermos y que están muriendo por la contaminación del suelo en la zona.
Mediante un recorrido hecho junto con El Sol de Toluca, los vecinos expusieron la contaminación del suelo por uso excesivo de agroquímicos (glifosato), que es regado para los cultivos de maíz pero seca los árboles.
" Son varios problemas, el que más preocupa es que algunas especies de árboles se están muriendo", comentó Alejandro Rivera Gutiérrez, vecino del Refugio y especialista en agronomía.
Asimismo, señalaron que la actividad excesiva de las minas de grava y arena también han provocado daño al hábitat de la zona.
“Algunas minas no tienen permisos y así operan”, acusaron los vecinos.
La zona pegada al río que cruza parte del Refugio, es la más contaminada. Por el momento el cauce está seco pero en tiempo de lluvias se llena.
“En esta zona tiran mucha basura, podemos encontrar llantas, botes de herbicidas y animales muertos”, señala Alejandro.
La tierra de esa zona está clara, porque es síntoma de que le faltan nutrientes y los químicos la han afectado.
El exceso de animales muertos que son arrojados en las periferias, provoca un fenómeno denominado como “urea”, el cual afecta a los árboles.
“La urea son los residuos de los animales muertos y también desechos del borrego que su composición física, es muy caliente y quema todo tipo de plantas y árboles”, explicó el especialista.
Otros problemas que presenta la zona abierta del Refugio, es la quema de pastizales, lo cual cada temporada de siembra reduce el hábitat de especies silvestres de la zona.
“Muchos de los incendios son provocados y eso afecta los nidos de algunas especies, mata víboras, ardillas, lagartijas y otras especies”, señalaron.
Los vecinos también denunciaron la tala presuntamente ilegal de al menos nueve pinos en la zona donde se ubica un espacio público usado como canchas de futbol.
Los árboles habrían sido cortados por un privado, quien presuntamente contaba con un permiso otorgado por las autoridades de medio ambiente.
