Ejidatarios del municipio de San Antonio La Isla denunciaron a esa autoridad municipal ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por la deliberada contaminación de sus terrenos de cultivo, a consecuencia de la descarga de aguas residuales presuntamente provenientes de diversos fraccionamientos asentados en esa región, así como del municipio vecino de Calimaya.
De acuerdo con los afectados, la descarga del agua contaminada se hace sin previo tratamiento, pues presuntamente las plantas tratadoras de esos municipios no están en funcionamiento.
"Sabedores que los Ayuntamientos de todos los municipios del valle de Toluca, en términos de ley, deben de cumplir estas normas, ya que al no haber dicho tratamiento dichas aguas, tienen como punto final de descarga cuerpos federales, que así mismo van aumentando el deterioro Río Lerma", se lee en la demanda colectiva de los ejidatarios.
En el documento, los afectados solicitaron a la Profepa detener los posibles delitos ambientales, pues temen que haya afectaciones a la salud de los habitantes de la región de la zona de descarga así como al medio ambiente.
A esta demanda se sumó el Comité Técnico de Operación del Acuífero del Valle de Toluca y el diputado federal Nivardo Torres Siles, documento que fue compartido a El Sol de Toluca.
Por medio de un escrito, el legislador federal refiere que los municipios de San Antonio La Isla y Calimaya “son responsables del tratamiento de sus aguas residuales producto de todos sus drenajes y que como punto final de vertimiento, se hace a cuerpos federales”.
Por ello, solicitó a la Profepa actúe en consecuencia con el objetivo de minimizar riesgos de contaminación a vecinos de San Antonio La Isla y hasta de Atizapán Santa Cruz.