Mientras actores políticos de Morena advierten avances en el primer año del presidente, Andrés Manuel López Obrador, y una fuerte lucha contra la corrupción, el dispendio, y los poderes fácticos; la oposición señala que existen retrocesos y un gran pendiente que es la inseguridad.
El coordinador de Morena en la Legislatura local, Maurilio Hernández advirtió que la Cuarta Transformación, encabezada por el presidente de la República enfrenta un ataque de los poderes fácticos económicos, pero también de los “delincuentes de cuello blanco”.
“Esa es la realidad, entonces tenemos que demostrar que el gobierno de México va empezando un proceso de transformación y que esto implica muchos costos y que el presidente los está resistiendo, apoyado por la mayoría”.
Advirtió que de lo mejor en esta administración destaca la consolidación de la institución presidencial con una nueva faceta, un gobierno vinculado estrictamente al pueblo y al servicio del pueblo México, pero quienes se sienten afectados han emprendido una campaña fascista, en busca de desprestigiar el esfuerzo del presidente.
“Esto es histórico, siempre ha pasado, en cualquier esfuerzo de transformación hay una reacción y la reacción que hoy enfrentamos es de la extrema derecha: esté donde esté, puede estar en alguna organización política, empresarial, son posiciones de ultraderecha que tratan de frenar la transformación”.
Para el diputado local la seguridad es el principal pendiente, pero advirtió que es también un poder fáctico: el crimen organizado que logró penetrar las instituciones durante 30 años y está hasta la médula.
Anteriormente -sostuvo- pactaban con determinados cárteles para mantener las cosas con aparente calma, pero no se combatía el problema. Ahora, dijo, se combate el problema, se está sacudiendo el avispero y por eso hay reacciones, recrudeciendo la violencia, pero uno de los objetivos centrales del actual gobierno es lograr la paz, combatir la violencia y la inseguridad.
Por su lado, el líder de la bancada del PAN Anuar Azar advirtió que el primer año del gobierno de López Obrador ha sido de excusas, el más violento en la historia del país, con cerca de 200 mil empleos perdidos y con retrocesos.
“Le queremos apostar al carbón cuando el mundo le apuesta a las energías limpias, le queremos apostar a las refinerías cuando la tendencia son vehículos eléctricos, hablamos de una política de abrazos y no balazos, pero la delincuencia no cede.
“Hay que abrazar a las víctimas, hay que abrazar a las personas que han perdido a sus seres amados producto de la delincuencia, y contra los delincuentes ejercer todo el peso de ley, como ustedes vieron el resultado de la economía no crece, estamos muy lejos de las promesas que se le hicieron al país, se habló de que la cuarta transformación en seis meses iba a pacificar al país, a México, se creó a Guardia Nacional y no hay resultados”.
Azar dijo que el primer año de gobierno ha sido totalmente de excusas, pues han culpado al expresidente Felipe Calderón de decisiones irresponsables como la cancelación del aeropuerto, la pérdida de empleos, y opinó que el país no va por un buen camino, no va por un buen rumbo, pero aclaró que quieren que le les vaya bien a los alcaldes, al país, al presidente.
No obstante, advirtió que no permitirán que se sigan violentando a los organismos autónomos que le han costado tanto al país, ni que se sigan dando pasos hacia atrás en la cancelación de las estancias infantiles, del seguro popular, el apoyo a la sociedad civil organizada.
El diputado de Morena Faustino de la Cruz adelantó que este domingo acudirían al Zócalo y advirtió que mientras el presidente está echado para adelante, ha recorrido el país y lucha contra la corrupción, contra la ineficacia,la falta de operatividad y de estructuras arcaicas que falta cambiar.
Consideró que lo mejor es que el presidente ha mantenido estabilidad social en el país, aunque admitió que el tema de la inseguridad es un pendiente, pero también subrayó que los gobiernos estatales deben apoyar al presidente, cerrar filas en la defensa de la soberanía. “Hay un parteaguas, el pendiente es la seguridad, seguir combatiendo la corrupción, el presidente está trabajando y hay que apoyarlo”.
