La pandemia de Covid-19 traerá consigo una oleada de padecimientos mentales que afectará a la población mexiquense, de ahí que el Estado de México ha adoptado un nuevo modelo de atención a la salud mental y para ello, hay un “ejercito” de mil 810 trabajadores, así lo señaló el secretario de Salud del Edomex, Francisco Javier Fernández Clamont.
Aunado a esto, el funcionario reconoció que el tema de salud mental será fundamental en este retorno a la nueva normalidad en donde mucha gente, además de sufrir la pérdida de algún familiar, estuvo confinada en su casa.
Ante este panorama detalló que de acuerdo con cifras del INEGI, la entidad mexiquense se encuentra en el lugar 22 a nivel nacional en el tema de suicidios con una tasa de 4.6 por cada 100 mil habitantes.
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“Yo soy pediatra psicosanalista de niños y adolescentes, y hoy día debe atenderse no solo la salud orgánica de las personas sino también de manera conjunta la salud mental”, indicó.
En cuanto al tema de salud, el funcionario destacó que el Edomex cuenta con tres hospitales psiquiátricos ubicados en Ixtapaluca y Acolman, además de tres centros integrales de salud mental con psiquiatras ubicados en Ixtapaluca, Chimalhuacan y Cuautitlán, además de 34 centros de atención primaria en adicciones que se van van a transformar con este nuevo escenario de atención a la salud mental que ha planteado la Federación.
Cualquier especialista en salud mental dirá que es un acierto fusionar la salud mental con el problema de adicciones.
Para este nuevo modelo, refirió, ya se ha comenzado a trabajar con la Comisión Nacional contra las Adicciones, los Servicios de Atención Psiquiátrica y con el Consejo Técnico de Salud Mental. Dicha fusión, subrayó, permitirá al estado contar con políticas públicas que amplíen y prioricen la atención mental.
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Asimismo, dio a conocer que en la actualidad todas las mujeres embarazadas que ingrese a unidad hospitalaria del ISEM tienen que pasar a los servicios de psicología al igual que los niños que acudan consulta en alguna de las unidades tendrán que ser atendidos por el área psicológica respectiva intervenida en psicológica.
“La intención es que desde esa edad se puedan inhibir los trastornos de personalidad al pasar a la adolescencia porque de ahí se derivan problemas como violencia intrafamiliar, delincuencia y consumo de drogas”, finalizó.