El hecho de que el Estado de México colinda con la Ciudad de México, donde han incrementado los contagios por Covid-19, hace necesario que se suspendan las clases presenciales en la entidad y se analice el comportamiento del virus durante todo el mes de julio y, a raíz de ello, tomar la decisión de regresar o no a las aulas en agosto, señaló el presidente de la Academia Mexiquense de Medicina, Alfredo Vigueras Rendón.
El especialista indicó que ante el aumento de casos por Covid-19 en la capital del país, las autoridades de la Ciudad de México determinaron suspender las clases presenciales a partir de esta semana.
“Nosotros aquí en el Estado de México nos encontramos en el color verde del semáforo epidemiológico supuestamente, pero como estamos colindando y hay una relación estrecha con la Ciudad de México, no sería sorpresa que pasemos al amarillo dado el incremento de casos”, refirió.
Declaró que de acuerdo con el último corte de las cifras dadas a conocer por el gobierno federal durante este martes, se presentaron de nueva cuenta cinco mil nuevos casos confirmados y el mismo gobierno de la Ciudad de México aceptó un incremento del 9% en el número de casos.
“Ante estas cifras, vale la pena valorarlo y aunque estemos en verde suspender las clases presenciales. Debemos tomar muy en cuenta la situación geográfica del Estado de México y su cercanía con la Ciudad de México”, enfatizó Vigueras Rendón.
Aunado a ello, dijo, se suma el comportamiento que tuvo la ciudadanía el pasado domingo en los festejos del Día del Padre, donde hubo muchas reuniones familiares bajo el supuesto de que los mayores ya están vacunados, sin embargo, hay todavía un sector que no ha recibido su vacuna.
Y es que, detalló que la población de los 30 años para abajo, incluyendo a adolescentes y niños, no están vacunados y si bien los infantes no padecen la enfermedad de manera grave, sí se convierten en agentes contagiosos y por lo mismo pueden llevar el virus al hogar y propagarlo.
