La Diputación Permanente exhortó a la Secretaría de Salud del Gobierno Federal para que en la primera fase de vacunación por Covid-19 considere a personal de seguridad pública, protección civil, bomberos y cuerpos de rescate.
Advirtió que todos ellos están en la primera línea de atención de emergencias, son primeros respondientes y tienen contacto con población afectada por ese virus.
Este jueves, la Permanente aprobó el exhorto propuesto por el diputado Max Correa, quien advirtió que ese personal es el primero en acudir para salvar la vida de los demás, por lo cual son vulnerables de ser contagiados y se requiere considerarlos.
En tanto, Brenda Escamilla, legisladora del PAN, propuso exhortar a la Secretaría de Salud estatal a informar el estado que guardan los certificados de defunción, pues la población, dijo, exige saber por qué no hay esos documentos y que los municipios ofrezcan información sobre el tema.
Acusó que derivado de la pandemia se han registrado distintos abusos entre ellos el cobro de hasta $9000 por la expedición de un certificado de defunción e integrantes de servicios funerarios en el Valle de Toluca incluso ya presentaron una queja la comisión de Derechos Humanos estatal por la falta de papelería.
Sin embargo, el priísta Juan Maccise Naime subió a tribuna para señalar que el exhorto no debía realizarse a la dependencia estatal, sino a la Secretaría de Salud federal y anunció su voto en contra. El punto fue enviado a comisiones.
Escamilla lamentó la falta de sensibilidad y acusó que el punto estaba acordado en la Junta de Coordinación, pero el coordinador del PRI, Marlon Martínez "cabildeó" para que no se avalará.
En tanto, el diputado Margarito González Morales leyó el punto de acuerdo propuesto por Max Correa y recordó que hasta el 27 de enero, en el país había más de un millón 788 mil casos de Covid y más de 152 mil defunciones por ese virus.
Aún así, el personal de primera línea ofrece atención de emergencias como policías, elementos de ciertas áreas de seguridad, paramédicos, técnicos en urgencias médicas, bomberos y personal de áreas de protección civil de todo el país, pues no han dejado de brindar sus servicios y se encuentran en estado de vulnerabilidad con altas probabilidades de contagio.
“Son quienes acuden al primer llamado de una emergencia, son quienes sanitizan las áreas de trabajo público e incluso privado, hospitales, oficinas, etcétera”, señala el documento.