San Mateo Atenco, México.- La ayuda ha comenzado a llegar a los distintos barrios y zonas afectadas por el desbordamiento del Río Lerma; sin embargo alrededor de 40 familias que viven en el rincón del Barrio de Guadalupe se han autonombrado “los olvidados”. Denuncian que mientras que algunas autoridades acuden al sitio sólo “para tomarse la foto”, sólo les han entregado una despensa.
Habitantes de este pequeño asentamiento, ubicado a la orilla del barrio antes mencionado y a escasos metros del afluente que conecta con el río, aseguran que “amanecieron nadando” en las aguas negras.
Abordo de una chalupa con agujeros, José Guadalupe -vecino de la zona y cuya vivienda se encuentra ubicada en la calle de Arboledas esquina Cinco de Mayo- explicó que desde el desastre no han recibido el apoyo de ninguna autoridad.
Muchos piensan que somos los que siempre nos inundamos, pero no es así, yo que recuerde teníamos como 15 años que no nos pasaba esto.
Explicó que cuando amanecieron bajo el agua, llegaron elementos del Ejército y elementos de la policía estatal, pero sólo entraron para tomarse la foto, “si vinieron militares y policías, pero sólo se tomaron fotos según ayudando y se fueron”, refirió.
Ante ello, indicó que entre las familias se apoyaron y con mucho trabajo lograron colocar costales de tierra para poder entrar a sus hogares.
Tuvimos que hacer la labor nosotros y nadie nos ayudo, bueno un policía municipal si nos echó la mano, pero nada más.
Morales Gómez recalcó que lo único que les ofrecieron fue una despensa, sin embargo, de nada les sirvió, “nos mandaron avena, frijoles y arroz, pero para qué, no podemos ni cocinarlos. Una vecina cocina con leña y toda se le mojó, cómo va a elaborar sus frijolitos”, mencionó.
Consideró que en esta situación se encuentran alrededor de 40 domicilios localizados en esta zona y las familias prácticamente han sido olvidadas por las autoridades de los tres niveles de gobierno."Aquí nada más vemos como pasan y nadie se para ha ayudarnos”, estableció mientras sacaba con una pala el agua que le entraba a su chalupa, misma que le ayuda a entrar y salir de su hogar.
Ante ello, hizo un llamado a las autoridades para que los volteen a ver, pues no les han entregado ni un cubre-bocas, “en cuanto apoyo en salud, si han venido las enfermeras y están al pendiente, van recorriendo casa por casa y nos ofrecen vacunas, en eso si no nos podemos quejar”, reconoció.
Al respecto la señora Remedios Ortiz afirmó que efectivamente nadie los ha visitado y dijo “cuando estaban en elecciones aquí venían y ahora ni se paran, eso es injusto y por eso estamos molestos”.
Durante el recorrido efectuado por la zona, una cuadrilla de enfermeras del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) que recorría casa por casa, platicó que efectivamente su tarea es cuidar la salud de los vecinos.
Hay varias brigadas que recorremos casa por casa y ofrecemos las vacunas de tétanos y hepatitis, además de desparasitantes y les ofrecemos pláticas sobre los cuidados que deben tener, sobre todo en el consumo de agua. Enfermera
Precisó que la recomendación principal a las familias afectadas es que ante cualquier síntoma de vómito o diarrea, de cualquiera de sus integrantes -principalmente menores de edad-, acudan de inmediato a su centro de salud o albergue.
“También les insistimos en el lavado de manos, sobre todo por los contras que puede traer estar en un lugar inundado con aguas negras”, finalizó otra de las empleadas del sector salud.