Raúl Ortíz Ramírez, hermano de Fernando, el profesor asesinado al interior de un autobús el 19 de febrero, pidió a la ciudadanía, a quienes hayan sido testigos del homicidio, aportar elementos ante las autoridades para que los asesinos sean detenidos y castigados.
En conferencia de prensa advirtió que el autobús donde viajaba su hermano no tenía cámaras de vigilancia, y las de las calles no han aportado grandes elementos; por lo cual requieren el apoyo de quienes ese día viajaban, pues no hay testigos que permitan identificar a todos los responsables del homicidio de su hermano.
Pidió a la gente ponerse en su lugar y pensar qué harían si el crimen se hubiera cometido contra algún familiar, pues ha transcurrido casi un mes del homicidio y dijo que no ha ofrecido una recompensa porque no tiene dinero.
Para la familia, subrayó, ha sido muy difícil entender que no solo le arrebataron la vida a su hermano, sino también todos sus sueños.
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Raúl Ortíz señaló que la persona detenida por la Fiscalía General de Justicia no es quien disparó contra su hermano, de acuerdo con las investigaciones, y aclaró que Fernando no llevaba ninguna computadora, pues estaba juntando dinero para comprar una, y aun así, le dispararon y le quitaron la vida.
“Esta persona que detuvieron están diciendo que él es el asesino, cuando en realidad no; yo leía notas y se cree que es el cabecilla, líder que dio la orden de que le dispararan a mi hermano, es la información que sé, pero quiero ser puntual, que no se siga distorsionando, que la gente que nos apoye tenga los datos precisos”.
Refirió que hasta el momento el único que ha declarado es el chofer de la unidad, pero no tienen más testigos, por lo cual pidió que la gente se atreva a hablar.
“Desafortunadamente el autobús no contaba con un sistema de vigilancia y tengo entendido que las grabaciones, lo del C5 no aportaron información muy verídica, o algo que pudiera ser de utilidad, por eso es que seguimos haciendo hincapié en que la gente se sume y nos pueda dar pistas.
Carecer de información, dijo, retrasa las investigaciones; por lo cual pidió que la ciudadanía aporte pistas, incluso si alguien identifica al detenido, como posible responsable de otro delito, aunque no sea por ese día pidió denunciar.
La información que tienen hasta el momento, dijo, ha sido por la Fiscalía General de Justicia.
Al final emitió un mensaje donde pide a la gente hablar y advierte que esta vez le tocó a su hermano, pero otro día puede ser a cualquiera.
“No entiendo por qué no se atreven a hablar, a ya casi un mes de que la vida de mi hermano le fue arrebatada injustamente seguimos sin tener pistas de esos malditos, si no he ofrecido una recompensa es porque en estos momentos no tengo dinero, estoy quebrado; sino, créanme que de verdad ya se las hubiera ofrecido.
“Solamente les pido que por un momento se pongan en mi lugar y piensen ¿qué hubieran hecho si la persona a la que asesinaron despiadadamente y sin compasión hubiera sido su hermano, su hijo, cualquier familiar, o un ser muy querido por ustedes? ¿Qué harían? ¿Acaso no saben lo que es no poder conciliar el sueño cada noche y cuando te despiertas quisieras creer que esto que está pasando no es real porque es sumamente doloroso?
“¿Saben lo difícil que es aceptar que ya nunca podré volver a ver a mi hermano, ni su demás familia? Que no solamente la vida le fue arrebatada, sino también grandes sueños, ilusiones, metas, muchos aportes que él tenía para dar a la sociedad. Porque él era una persona de bien que no le hacía daño a nadie y comprometido con su trabajo. Él buscaba hacer una diferencia significativa en el país: educar con principios y valores, mismos que le fueron inculcados y transmitir sus conocimientos”.
El joven advirtió que es muy duro recordar que crecieron juntos, pero él ya no está porque le arrebataron la vida y rogó a la ciudadanía que lo apoyen y denuncien, pues fue asesinado cuando iba por un nombramiento porque le dieron más horas de trabajo. Advirtió que tarde o temprano habrá justicia para su hermano.
