Una enfermedad vascular cerebral le apagó la luz, atrás dejó la noticia, la imagen y video de los acontecimientos sureños.
Hoy Paco Medrano encontró en las conchas una forma dulce de salir adelante.
“Y de pronto se me apagó la luz y ya no supe más. Ahora sé, según los médicos, que una enfermedad cerebral se llevó mis 50 años de vida y prácticamente volví a comenzar de cero”, relató Paco Medrano, un camarógrafo y periodista sureño radicado en Tejupilco.
En su casa, platicó que en agosto del año pasado la vida le cambiaría por completo, luego de un dolor en el oído que desencadenó una enfermedad vascular cerebral.
Ello, relató, prácticamente le dejó inmovilizado la mitad del cuerpo, además de que le apagó por completo un ojo y silenció su sentido del oído.
“Estuve más de un mes hospitalizado y bueno es como si de repente despiertas y no te puedes mover. Toda tu vida quedó atrás y empiezas de nuevo”, platicó el excamarógrafo de una televisora nacional.
Dio a conocer que después de su trabajo de camarógrafo decidió emigrar al municipio sureño de Tejupilco, donde continuó su carrera periodística en una página local.
“Comencé a seguir la noticia desde este lado del Estado de México y el proyecto caminaba muy bien, la idea era crear un programa de noticias acá en Tejupilco, pero bueno la enfermedad no me dejó”, recalcó.
Recordó varios sucesos ocurridos en este municipio del sur del estado y el seguimiento muy puntual que le daba a los aterrizajes de aeronaves de emergencia que sucedían a metros de su casa.
“Yo escuchaba un helicóptero en la deportiva y me desplazaba rápidamente a bordo de mi motoneta. Hay algo, lo sabía, y de inmediato me ponía a investigar para enviar la información fresca a mi página informativa”, decía.
Sin embargo, con nostalgia aceptó que la enfermedad cerebral le cambió todo, pero ante la difícil circunstancia que todavía enfrenta la vida seguía y tenía que salir adelante.
“Después de todo lo que había ganado de pronto comienzo de cero. No sabía qué hacer y eran noches sin dormir pensando en qué podía hacer para enfrentar esta situación, no sólo por mí sino por mi hijo y mi familia”, aseveró.
Su madre y su hijo, reconoció, fue una parte muy importante que lo llevó a no dejar vencerse por este padecimiento cerebral.
