La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el Gobierno mexiquense firmaron un convenio de colaboración y coordinación, enfocado a precisar los alcances de la posesión física, jurídica y las atribuciones de ambas partes, sobre el Viaducto Bicentenario.
Con el documento publicado en Gaceta de Gobierno y en el Diario Oficial de la Federación se anticipa además una posible ampliación para conectar esa vía con el Circuito Exterior Mexiquense, a fin de conectar al nuevo aeropuerto Felipe Ángeles.
El convenio también busca aclarar cuestiones jurídicas, pues las autoridades aseguran que ese tramo carretero le fue entregado, a través de un convenio, al gobierno mexiquense desde 1983 por parte de la SCT; con lo cual, el gobierno mexiquense asumió facultades de la Federación y obtuvo un poder jurídico.
El 16 de julio, el diputado de Morena Max Correa Hernández pidió al entonces secretario de Comunicaciones federal Javier Jiménez Espiriú atender el exhorto que la Legislatura mexiquense le hizo en noviembre del año pasado y emitir una declaratoria de rescate de la concesión del Viaducto Bicentenario.
El legislador local afirmó que la empresa Aleática, antes OHL, obtiene ingresos ilegales de hasta mil millones de pesos anuales por el cobro de peaje del segundo piso de ese viaducto, pues no tiene una concesión de la SCT; por lo cual no está facultada para cobrar cuota de peaje por el uso de esa vía de comunicación de jurisdicción federal.
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El convenio
El convenio refiere que en mayo del 2008 el gobierno estatal, a través de la Secretaría de Comunicaciones, otorgó la concesión del Viaducto Bicentenario S.A. de C.V. para la construcción, explotación, operación, conservación y mantenimiento de esa vía, previa licitación.
El convenio que se acaba de firmar entre la SCT y el gobierno estatal, establece que buscan fortalecer la coordinación que rige su relación en torno a la conservación, reconstrucción, mantenimiento, operación y ampliación de ese viaducto y asegurar, entre otras cosas, el libre tránsito, el desarrollo y el buen funcionamiento de la infraestructura de las vías de comunicación de la zona metropolitana.
Reconocen legalidad
A la vez, ambas partes reconocen la validez y legalidad de los actos relacionados con dicha conservación, reconstrucción y ampliación, en específico el otorgamiento del Título de Concesión para la Construcción, Explotación, Operación, Conservación y Mantenimiento del “Viaducto Bicentenario”.
Ese viaducto incluye los tramos Periférico Manuel Ávila Camacho, desde el toreo de cuatro caminos en Naucalpan, a Valle Dorado en Tlalnepantla (km. 23+000 de la Autopista México-Querétaro) y del km. 23+000 al km. 44+000 de la Autopista México-Querétaro, en Tepotzotlán (Tepalcapa) y el uso de la Autopista México-Querétaro que requirió su construcción.
Las autoridades señalan que el 6 de marzo del 2020 la Secretaría de Comunicaciones notificó al gobierno Estatal un procedimiento de inicio de sanción, por el posible incumplimiento en las obligaciones, y las autoridades mexiquenses respondieron que no había lugar a imponer sanciones.
Argumentaron que la autopista México-Querétaro en el tramo carretero le fue entregado al gobierno estatal en 1983, previo convenio entre la federación y el gobierno mexiquense, con lo cual las autoridades mexiquenses asumieron facultades que correspondían a la federación en un marco de coordinación.
Por ello, sostienen en el documento, la entrega constituye un poder jurídico y derecho más amplio que el que derivaría de una concesión, pues implica que la federación cedió al Estado de México sus funciones para que las lleve a cabo, e implica que la entidad asumió las funciones no para explotar el camino, sino como corresponsable en la prestación de un servicio público.
Según el documento, el gobierno Estatal acreditó a la SCT el cumplimiento, desde 1983 a la fecha, de sus obligaciones en la conservación, reconstrucción y ampliación de la vía.
También informó que la obra de infraestructura se encuentra en operación desde el 20 de septiembre del 2009, y de acuerdo con el título de concesión, cuando venza el plazo de vigencia de la concesión la obra se revertirá a favor del dominio público del estado de México, libre de cualquier gravamen.
Las cláusulas del convenio precisan los alcances de la posesión física y jurídica, las atribuciones de la Secretaría de Comunicaciones y del gobierno Estatal sobre el Viaducto Bicentenario y las partes acuerdan que ese convenio surtirá efectos a partir de suscripción y hasta que se alcancen los fines de su formalización, o hasta que venza el plazo del título de concesión.
Incluso, prevé que el convenio podría ser prorrogado.
A través de él, el gobierno asume las obligaciones de conservar y mantener el derecho de vía, la vigilancia y regulación de tránsito, presentar un programa anual de conservación y mantenimiento, cumplir con la normatividad, intervenir ante autoridades y grupos sociales para atender cualquier procedimiento, o reclamo por la conservación y mantenimiento. También verificar que se respeten las normas ambientales, sacar en paz y a salvo a la Secretaría de Comunicaciones, en caso de que fuera objeto de una demanda, procedimiento administrativo o reclamación de cualquier ámbito.
Podrían ampliar el Viaducto
Uno de los objetivos establecidos en el convenio es el de coadyuvar, desarrollar y dirigir las acciones necesarias que permitan la interconexión del Viaducto Bicentenario con el Circuito Exterior para atender la conectividad del aeropuerto Felipe Ángeles con el sistema aeroportuario del centro del país.
También prevé que una vez cumplidos los derechos y obligaciones establecidos en la concesión, y cuando el gobierno estatal tenga derecho a recibir beneficios económicos por ingresos excedentes, la SCT establecerá mecanismos para compartir el 50% de los ingresos, y una vez concluida la concesión, podrá recibir el gobierno la reversión del activo y conservarlo.
Cuándo concluya el convenio, el gobierno entregaría a la federación, a través de la SCT, el tramo señalado y el activo denominado Viaducto Bicentenario sin costo y libre de cualquier gravamen.
En tanto, la SCT deberá proporcionar al gobierno estatal el apoyo técnico para la conservación y mantenimiento para la obtención de autorizaciones ambientales en materia federal, aprobar y autorizar el programa anual de conservación una vez que concluya el convenio, recibir del gobierno mexiquense el tramo y el activo Viaducto Bicentenario
