El Parque Nacional de los Remedios, decretado como Reserva Nacional desde el cardenismo en abril de 1938, ha perdido una buena parte de sus superficie al pasar de 400 a 100 hectáreas en los últimos años.
De acuerdo con algunos vecinos de la zona, esta situación ha sido provocada por incendios, la tala clandestina, la presencia de asentamientos irregulares así como la descarga de cierto tipo de residuos.
Ante esta situación, la Comisión Estatal de Parques Naturales (Cepanaf) reconoce que aunque las 100 hectáreas están protegidas, su extensión original también se ha visto “drásticamente reducida” debido al crecimiento demográfico y a asentamientos irregulares del municipio; además, no cuenta con un programa de conservación y manejo.
Como resultado de esto, organizaciones como Bicimixtles y la Red Mexiquenses por la Movilidad Sostenible, exigió a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) la protección del área misma que cuenta con un Santuario a la Virgen de los Remedios, un acueducto colonial y una zona arqueológica con un templo Chichimeca, rodeado del cerro de Moctezuma.
Además, vecinos cercanos a esta zona boscosa demandan a la Secretaría de Desarrollo Urbano, integrar el Parque Nacional de los Remedios al Programa de Mejoramiento Urbano (PMU) del gobierno federal debido a que es notoria la presencia de viviendas irregulares y paracaidistas.
A la reserva natural del bosque de los Remedios, no se le ha puesto cuidado y es una vergüenza que se mantenga así.
Los grupos ambientalistas declararon que la responsabilidad también es municipal y estatal ya que desde 1986 se firmó el “Convenio de colaboración administrativa entre la federación, el Gobierno del Estado de México y el Ayuntamiento de Naucalpan" para la conservación, protección, vigilancia, promoción y desarrollo del Parque Nacional Los Remedios; dependencias que hasta el día de hoy aparentemente no han hecho nada por el rescate del bosque.