Toluca, México.- Líneas de transporte público usan combustible robado en municipios del Valle de Toluca de forma clandestina, reveló Odilón López Nava, delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte Pasaje y Turismo (Canapat).
De acuerdo con el líder transportista, el consumo de hidrocarburo donado ha incrementado entre líneas urbanas que son irregulares, taxis colectivos y mototaxistas de Toluca.
“Hay líneas que consumen el huachicol y contribuyen a ese delito, porque es más barato y no tienen regulación”, sostuvo López Nava en entrevista telefónica para este diario.
Aunque no precisó el número de líneas, ni agrupaciones, acusó que las principales consumidoras de combustible robado son las que prestan servicio a la zona norte de Toluca, así como agrupaciones de taxistas que prestan servicio al sur y Tenango del Valle.
“Esta situación es incontrolable, las líneas que consumen huachicol también compran autopartes robadas y eso afecta a los que somos regulares”, afirmó el delegado de la Canapat.
Las líneas que adquieren el combustible robado lo hacen en tienditas y casas clandestinas que venden por garrafas el líquido a un precio más económico.
López Nava dijo que las 35 líneas urbanas y foráneas que pertenecen a la Canapat, están bajo el rígido control para el abastecimiento de combustible, pues incluso Pemex les suministra de forma especial pipas de combustible por semana para evitar desabasto.
El número aproximado de taxis que podrían consumir huachicol en el Valle de Toluca, son al menos 12 mil unidades.
Mientras que de las líneas de servicio urbano son un promedio de 10 que circulan en rutas de Toluca y municipios aledaños.
