El Frente para la Renovación de la Izquierda en el Estado de México (FRIEM) no genera ninguna división, ni problema al interior del PRD porque no es una organización nueva, tiene poca representatividad y una evidente intención de posicionar al alcalde de Villa de Allende, Arturo Piña García.
El secretario general del PRD en el estado de México Javier Rivera Escalona afirmó que el grupo de Piña lleva unos diez años integrado y este fin de semana se relanzó, pero es uno de los más pequeños del sol azteca con apenas 10 de 200 consejeros estatales.
Advirtió que si Piña García quiere ser aspirante a la candidatura a gobernador primero debería solicitar licencia al cargo de alcalde y ajustarse a la ley para no incurrir en actos anticipados.
Rechazó que esa fuerza haya olvidado a sus militantes y criticó que Piña señale que la militancia siente que la han hecho a un lado en los procesos electorales, cuando él ha tenido cargos de manera ininterrumpida por 18 años, pues primero fue alcalde de Donato de Guerra, después legislador local, alcalde de Villa de Allende, nuevamente diputado local, presidente municipal de Villa de Allende y en enero se reelegirá en el mismo cargo, por lo cual no ha dejado participar a otras personas en su región.
Consideró falso que las y los militantes se sientan olvidados y opinó que el relanzamiento del frente es por la lucha interna y las aspiraciones personales, pero no es algo nuevo.
Refirió que ese frente es una subcorriente de Nueva Izquierda que concentra a cuatro expresiones: la de Ramón Montalvo, ex alcalde de Valle de Chalco; la de la ex diputada federal Claudia Reyes en Huixquilucan, el ex dirigente Cristián Campuzano con Comprometidos con México y la de Arturo Piña.
Aclaró que al interior del sol azteca hay pluralidad y respeto para que cada quien se organice y la forma de determinar el peso político es en el Consejo estatal, donde Piña tiene apenas una decena de 200 consejeros estatales, por lo cual dudó que tenga representantes en 50 municipios. “No es nuevo, es una reedición de lo que ha hecho en los últimos diez años, con representación en Villa de Allende”.
Javier Rivera advirtió que en el evento del fin de semana Arturo Piña prácticamente anunció que buscará ser precandidato o aspirante a la candidatura por la gubernatura del PRD, por lo cual lo llamó a conducirse dentro de los cauces legales, y si esa es su pretensión, debería separarse del cargo de presidente municipal que asumirá en enero porque se reeligió y no puede ser alcalde y andar recorriendo los municipios.
La ley, añadió, es muy explícita y con sus recorridos Piña podría incurrir en actos anticipados de campaña y en alguna falta si busca promocionar su imagen. “Es muy respetable el interés, pero debe respetar la normatividad interna y la general”, señaló.
Recordó que en el Congreso nacional perredista aprobaron por unanimidad un resolutivo donde se abrió la posibilidad de aliarse con todos los partidos, incluyendo a Morena, y a la o el candidato lo definirá la mayoría de los consejeros, pero Nueva Izquierda no tiene ni un tercio, pues Vanguardia Progresista y ADN representan las dos terceras partes.
Por ello, la mayoría definirá al candidato y la política de alianzas, pero lo que se ha dicho hasta el momento es que irán solos a la elección a gobernador del Estado de México en el 2023.
