Toluca, México.- Desde su surgimiento el proyecto el Tren Interurbano México-Toluca ha sido cuestionado por la falta de planeación y por su manejo electorero, expresó el investigador de la UAEM Fermín Carreño Meléndez y, agregó, además de violentar muchos preceptos ambientales ha demorado su realización y ha registrado un incremento sistemático de sus costos.
Precisó que ésta es ya una forma “transfigurada” de corrupción que se tiene, pues se hacen estimaciones para la obra en un porcentaje, pero luego los costos se escalan con incrementos de hasta 30 y 35 por ciento, pero a quienes hacen consultoría sólo se les permiten estos incrementos en porcentajes de entre 10 y 15 por ciento; lo cual sólo se permite en el Estado de México y en el país.
“Los retrasos son una cuestión que (utilizan) para tratar de ajustar bien al calendario electoral, eso lo vimos en año pasado, ellos estaban tratando de llevar bien las cosas para que pudiera ser a los tiempos electorales y parece que no nos equivocamos, así lo van a manejar, estaba planteado para el segundo semestre, seguramente unas semanas antes de la elección lo van a soltar, entonces, hay mano negra”, aseveró.