En la ceremonia religiosa para honrar la muerte del padre Silvestre Pérez Figueroa, el Arzobispo de Toluca, monseñor Francisco Javier Chavolla Ramos, pidió a los fieles católicos prepararse para el encuentro con Dios, un encuentro que tarde o temprano pasará y representa que todos somos de Cristo y para Cristo.
La misa de exequias del padre Silvestre Pérez Figueroa, quien fuera párroco del santuario del Sr, Santiago en Temoaya, se realizó la tarde de este miércoles a puerta cerrada en las instalaciones de la Catedral de Toluca.
En su mensaje, el Arzobispo de la diócesis local, monseñor Francisco Jvaier Chavolla Ramos, dijo que en el vivir y el morir, todos los hombres son de Cristo, por ende invitó a los fieles a que esta espera debe de centrarse en el gozo de que “soy de Cristo y vendrá”.
Tenemos que tomar conciencia de que que no somos de este mundo ni para este mundo, somos de Cristo y para Cristo, esta es la razón de la alegría de la espera.Arzobispo de Toluca, monseñor Francisco Javier Chavolla Ramos.
Ciertamente, indicó, hoy estos acontecimientos invitan a centrarnos en la fe y en la esperanza; la fe porque invita a conocer profundamente de quién y para quién somos; y la esperanza, de confiar plenamente de que el Señor tarde o temprano vendrá.
Estos acontecimientos, agregó, es una invitación que hoy nos hace el Señor a todos para que nunca se pierda de vista la espera gozosa y la realidad siempre presente de la fragilidad humana, al ser polvo y la certeza de que un día la muerte llegará.
- Por si no lo viste: "Murió el señor de las tortas de helado"; crónica antes de un entierro en tiempos de Covid-19
Pero unida a esta realidad, subrayó monseñor Chavolla Ramos, está la esperanza, ya que tanto en la vida como en la muerte somos del Señor, de tal suerte que eso da fuerza y confianza de que un día estaremos unidos totalmente con Dios para siempre.
“Lo que hoy le pido a Dios es que me conceda y les conceda a todos y a cada uno de ustedes, la gracia de prepararnos día con día para el encuentro con Dios, un encuentro que se realizará, quieras o no quieras, por eso debemos estar vigilantes y siempre estar deseando con gozo y alegría que el Señor venga y nos lleve a gozar plenamente de su presencia y amor”, añadió.
En esta ocasión, finalizó el Arzobispo de Toluca, se entrega al padre Silvestre a las manos de María para que con amor lo envuelva y presente ante su mismo hijo Jesucristo.
El padre Silvestre Pérez Figueroa falleció a la edad de 77 años de edad.