Xonacatlán, México.- Con el lema “Le damos sabor a la inclusión”, niños con discapacidad intelectual, Síndrome de Down y autismo, encontraron en la repostería un camino para intentar derribar barreras y abrirse un lugar en la sociedad; su sueño, es crear una empresa y generar fuentes de empleo para aquellos que cuentan con capacidades diferentes.
“Muchas personas vienen y nos dicen que hace diferentes estás gelatinas o postres que venden, pues cualquiera las puede hacer; y les contestó, tienen mucho, pues son elaboradas no por personas como usted o yo, sino por niños especiales”, refirió Merit Castillo, maestra en educación especial del CAM número 4 María Montessori.
Ubicada en el municipio antes referido, el Centro de Atención Múltiple para personas con capacidades diferentes alberga a 64 alumnos que padecen principalmente de discapacidad intelectual, Síndrome de Down y autismo. Su misión, es la enseñanza educativa a nivel primaria y secundaria.
Dentro del plan de estudios, platicó la maestra, se contempla la realización de diversos talleres con el fin de preparar a los adolescentes para conseguir un empleo, sin embargo, afirmó que aunque ya hay algunos casos de éxito y alumnos han obtenido una plaza laboral, han sido excluidos por sus propios compañeros.
En este sentido, acompañada por los alumnos Rosario, Ángel y Josué, mencionó que ya con el consenso de los padres de familia, decidieron darle utilidad al taller de repostería, y comenzaron a elaborar gelatinas, pan casero, paletas de chocolate y su especialidad la gelatina de tamarindo.
De tal suerte, indicó Merit Castillo comenzaron a comercializar los postres primero en las instalaciones de la escuela y posteriormente buscaron otros espacios como fue las afueras de las oficinas de Sagarpa y los Juzgados de este municipio.
Sin embargo, la idea creció y por ende, buscaron un nuevo espacio y derivado de la ayuda del propietario de una casa ubicada en la zona centro del municipio, se estableció un pequeño puesto de venta todos los días jueves.
Además de que todos los postres son elaborados por los mismos niños y adolescentes, también este negocio es atendido por ellos mismos. Trato de que los padres de familia no estén con los niños, pues los protegen mucho y aquí se trata de que ellos salgan solos al mundo.
Resaltó que durante estos tres jueves han tenido respuesta favorable de la sociedad, aunque el objetivo no es vender mucho, sino es la inclusión de los niños y adolescentes, pues todavía se enfrentan a muchas barreras sociales.
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Mi sueño que lo comparto con muchos de mis alumnos, es que en algún momento tengamos una empresa bien consolidada, donde puedan trabajar los adolescentes con capacidades diferentes y se puedan valer por si mismos. Para ello, trato de inculcarles muchos hábitos desde higiene y vestimenta.
Finalizó que si bien los recursos recaudados ya han sido invertidos en utensilios para reforzar su lugar de trabajo, sería muy bueno que las autoridades gubernamentales les permitieran acceder a ciertos programas de apoyo con el fin de consolidar el sueño de estos alumnos.
