Internos del penal Neza norte "La Perla" y familiares señalaron que este lunes llegaron a ese lugar enfermos de Covid-19, provenientes del centro penitenciario de Cuautitlán; por lo cual, la población de ese reclusorio fue "amontonada" en dos pasillos de la parte baja y tienen miedo de contagiarse.
En entrevistas vía telefónica desde el penal, Justino , Alejandro y Luis Enrique, personas privadas de su libertad, advirtieron que quienes se encuentran en ese penal son inimputables y población vulnerable, pues la mayoría padecen enfermedades mentales.
Por ello, llamaron a las autoridades a trasladarlos a otros centros y explicar las medidas que han adoptado, pues el personal de custodios y los doctores que los atienden son los mismos, y si de por sí a veces no había medicamentos, temen que la situación empeore.
Uno de los internos refirió que llegaron 23 personas enfermas por el Covid-19 y fueron instalados en un módulo, mientras la población que ya estaba en "La Perla", fue llevada a otros pasillos.
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El centro penitenciario, explicó, está dividido en seis pasillos y tres niveles. Anteriormente, los internos estaban distribuidos en todos, pero ahora, las personas contagiadas fueron ubicadas en el segundo piso, pasillos cinco y seis; y el resto en el primer nivel.
Los internos se mostraron preocupados porque consideran que no hay garantías para evitar contagiarse. Temen por los riesgos y están preocupados por su salud y su vida; por lo cual quieren que los lleven a otros centros, pues además son enfermos mentales y vulnerables.
"Puede haber contactos por enfermeras, falta de medicamentos porque desde ahora no todos tienen, la verdad sí tenemos mucho miedo" explicó Granados.
Desde hace unos días, dijo, las autoridades habían tomado algunas medidas de prevención, como evitar el acceso a personas mayores al penal, y habían escuchado rumores de que habría traslados.
Ahora que llegaron, precisó, solo colocaron plásticos a un pasillo y les dieron cubrebocas.
En total, agregó, hay unos 132 internos, y con la redistribución, 55 fueron ubicados en el pasillo uno y 77 en el dos, mientras en el segundo piso colocaron a las personas contagiadas, y el tercero lo dejaron vacío.
Luis también precisó que tiene miedo de contagiarse, pues están expuestos, ya que no hay medidas adecuadas, ni protocolos, e incluso los propios custodios tienen miedo.
Explicó que hicieron la exigencia la directora, quien les dijo que hace todo lo posible para trasladarlos a otros penales, pues ya no quieren quedarse en "La Perla", al considerar que corren riesgo de contagiarse.
También señalaron que aún cuando la mayoría de los pacientes son ininmputables y en ese penal les prometieron muchas cosas, entre ellas: valorarlos más rápido, no los apoyan, pues hay quienes llevan más de los 15 años que señala la ley, en que ese tipo de personas pueden estar privadas de su libertad, y siguen ahí, con lo cual, violan sus derechos.
"Lo pintaron muy bonito, pero no, a veces no hay medicamento, a veces los médicos les disminuyen y entran en crisis y desestabilizan a los internos", explicó Muñoz.
Alejandro, quien es enfermo mental y tiene 10 meses en ese centro, coincidió en que tienen miedo de su vida, por lo cual piden que los lleven a otros penales.
En otra entrevista, Celia, familiar de uno de los internos, dijo que tanto ellos, como las familias están muy asustados y preocupados porque no saben qué va a pasar, por lo cual, pidió que las autoridades informen qué van a hacer.
"Como familiares estamos en la incertidumbre y tenemos miedo porque son internos con discapacidad y vulnerables a la pandemia, ellos también están asustados
"No han comunicado nada, no sabemos si habrá cuidados, o qué van a hacer. Tienen derecho a la salud, hay preocupación de lo que está pasando, cómo los van a cuidar, son vulnerables".
Admitió que parte del temor es que en esos penales podría no haber la capacidad para enfrentar la pandemia, pues los custodios y el personal médico es el mismo para atender a todos, el lugar es muy pequeño, a veces no hay medicamentos; por lo cual la familia los tiene que llevar y es difícil pasarlos.
Pidieron que las autoridades los escuchen.
