A pesar de que las autoridades gubernamentales autorizaron la apertura de los restaurantes en la entidad mexiquense, empresarios vallesanos de este sector consideraron que las estrategias para reactivar a la economía no están orientadas como deberían de ser.
Pues a más de una semana de haber conseguido este acuerdo, el panorama económico no parece mejorar.
“Estamos agradecidos que hay un pequeño avance, muy pequeño, pero hay un avance en términos de que nos dejan abrir y de que reconocen que no somos una fuente de contagio. Pero es una medida menos que a medias, porque en realidad, no conocen bien el funcionamiento del sector turístico, nos dejan abrir de las 6:00 de la mañana a las 6:00 de la tarde, en realidad no sirve”, explicó Salvador Enríquez, restaurantero de Valle de Bravo.
Pues consideran que las estrategias impuestas no deberían de ser las mismas para los restaurantes de la zona urbana, donde hay altos números de contagios de Covid-19, como para los restaurantes de lugares turísticos con menor número de contagios.
“Nos tratan como si fuéramos una zona urbana, su estrategia no ha sido benéfica para nosotros. Nos cierran a nosotros como Pueblo Mágico el fin de semana, nos dan en la torre, de hecho toda la vida siempre ha sido así, nosotros trabajamos 12 días al mes, que son los fines de semana, su estrategia de cerrar los fines de semana en un pueblo que se dedica al turismo, se me hace malísima”, reconoció Marina Cruz, empresaria de este sector.
Incluso, el cerrar los fines de semana y solo ofrecer el servicio para llevar, no está adecuadamente planeado, pues los restaurantes no están diseñados para sostenerse con esas estrategias.
“No hicieron una diferenciación con los destinos turísticos, que el sábado y el domingo, incluso en las ciudades, sábado y domingo son de los mejores días, entonces pensar que estos dos días solamente se dé para llevar, no está en nuestro ADN de los restaurantes el servicio para llevar, no nacimos para eso”, lamentó Salvador Enríquez.
De acuerdo con los declarantes, hace un año, al inicio de la cuarentena por Covid-19, los ahorros y el endeudamiento parecerían haber ayudado a pasar semanas complicadas, pero en la actualidad estas posibilidades no existen.
Ya que los gastos a diario no paran, y las ventas están por debajo del 30% con respecto a cómo venían trabajando durante el color naranja del semáforo epidemiológico del gobierno federal.
“Están muy bajas las ventas, nos sale como para pagar, me refiero a cómo vamos de retrasados en los pagos, con los proveedores, ahí es donde nosotros estamos adquiriendo una deuda, para que los chicos tengan una fuente de trabajo, no te alcanza o pagas salarios, que los tienes que pagar, pero se te quedan las demás deudas”, describió Marina Cruz dicha situación.
Exhorto a las autoridades gubernamentales
Por ello, la propuesta que tienen como empresarios vallesanos es que realicen mesas de trabajo, donde el gobierno y el sector privado propagan estrategias en conjunto para procurar la salud y activar la economía.
“Que de verdad se compenetren con los empresarios, que nos sentemos en una verdadera mesa de diálogo para decirles cómo nos ayudamos mutuamente, cómo resolvemos este problema de pandemia o de economía, cómo lo resolvemos juntos”.
“Hay buenas propuestas de nuestro lado, que ellos (las autoridades), entiendo que se cierran, o que las quieren escuchar o que nos las comprenden a cabalidad, creo que sí vale mucho la pena que abrieran una mesa de diálogo, pero en serio, con acuerdos en serio, no en un estire y afloje”, pidió Salvador Enríquez.
Así como tener apertura en el tema de pagos, pues hasta el momento no se ha hablado de una posible condonación, por ejemplo, de las licencias de funcionamiento, pues la economía del sector restaurantero no está en el mejor momento.
“Ellos deberían de buscar una estrategia para apoyarnos, y que valide toda la situación que ellos están diciendo que estamos viviendo, que, sí es verídica, pero que nos den más opciones, porque vamos y proponemos una estrategia y ellos nos rechazan”, pidió Marina Cruz.
