Hace un mes, durante la madrugada del 14 de febrero, Día del Amor, fue asesinada Marycarmen Monserrath “N”.
Monse, como le decían sus familiares, era una mujer originaria de Toluca.
Sin embargo, decidió emigrar hacia dicho sitio turístico en Baja California Sur para buscar nuevo horizontes, sin pensar que encontraría la muerte.
Su cuerpo, según los reportes, fue localizado a las 23:00 horas del lunes 15 de febrero dentro del departamento donde habitaba en la colonia Primero de Mayo, en la ciudad de San José del Cabo, Baja California Sur.
Luego del hallazgo, la Unidad Especializada en Investigación de Homicidio Doloso de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) inició una carpeta por los hechos.
Posteriormente se confirmó que había sido asesinada y violentada sexualmente, detallaron sus familiares.
Pero luego de varias semanas del crimen aún no hay avances en las investigaciones, lamentaron sus familiares quienes exigen justicia.
“Estamos destrozados y queremos que se haga justicia, que su muerte no quede en el olvido y el responsable o responsables sean castigados”, externaron sus familiares quienes habitan en la ciudad de Toluca.
Vale decir que su deceso se suma a dos presuntos feminicidios más ocurridos durante los meses de enero y febrero en dicha entidad, donde como en todo el país, los familiares deben luchar cada día con la lenta o en ocasiones nula aplicación de la justicia.
Según las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante el mes de enero a nivel nacional fueron reportados 96 feminicidios; sin embargo, en Baja California Sur no fue contabilizado ninguno.
EXIGENCIA
Durante la marcha en el Día Internacional de la Mujer, el pasado ocho de marzo, en Baja California Sur el grito de las manifestantes fue el de un alto a la violencia feminicida.
También exigieron a la Procuraduría estatal investigar con perspectiva de género todas las agresiones cometidas en contra de las mujeres, pues según los colectivos feministas los feminicidios sólo quedan catalogados como homicidios dolosos de mujeres, lo cual no abona en su erradicación.