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Feministas que fueron detenidas luego de tomar las instalaciones de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de México (Codhem) en Ecatepec, se deslindaron de los destrozos y quema del inmueble ocurrido el pasado viernes.
En punto de las 14:00 horas, siete mujeres del colectivo “La Manada Periferica” dieron una conferencia de prensa frente a las instalaciones de la Fiscalía Regional de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), ubicada en la Avenida Morelos en El Centro de Ecatepec.
Las feministas relataron que el pasado viernes 11, día que fue vandalizado y posteriormente quemado el inmueble, ellas ya se habían retirado de lugar hacia sus casas puesto que se encontraban cansadas y aun lastimadas, ya que tras ser liberadas de las instalaciones de la FGJEM de Atizapán, únicamente habían regresado por sus pertenencias, por lo que negaron rotundamente haber participado en los disturbios.
“Nosotras acudimos en apoyo de Kika, una conocida activista que junto a otras mujeres víctimas de violencia de género habían tomado las instalaciones de la Codhem de forma pacífica, depués llegaron hombres a bordo de camionetas sin identificar y de manera violenta a golpes nos llevaron a Atizapán, hasta donde llegaron mujeres de otros colectivos a ayudarnos”, relato una de las feministas.
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Las mujeres, a través de Shayda Ruiz, su representante legal, indicaron que agotarán todas las instancias en la entidad antes de acudir a organismos defensores nacionales o internacionales, añadió que exigirán la reparación de los daños pues sus mochilas se las regresaron vacías, dos celulares se perdieron, sus tarjetas de banco e identificaciones les fueron robadas; la destitución de los policías que participaron en su detención y traslado, así como la de varios funcionarios públicos del orden estatal y municipal.
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La abogada pidió a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) que sean desestimados los cargos en contra de las feministas, ya que por el delito de ocupación ilegal y daños en un inmueble público lograron su libertad bajo las reservas de ley.
“Nosotras responsabilizamos al Estado por haber violentado nuestros derechos porque estábamos abiertas al diálogo, porque a nosotras ya se nos había dicho que estábamos respaldadas por derechos humanos y nos entregaron las instalaciones de la Codhem de manera pacífica”, dijeron.
Antes de retirarse, las feministas demandaron la destitución de altos funcionarios, como la secretaria de Seguridad del Estado de México, Maribel Cervantes Guerrero; el titular de la FGJEM, Alejandro Gómez Sánchez y el presidente de la Codhem, Jorge Olvera; además de diversos funcionarios municipales.
