Ocuilan, México.- “Ya casi llega, ya casi llega”, le decían a doña Regina –una mujer de 100 años de edad-, quien con dificultad, pero con paso firme alentado por su fe, subía escalón por escalón a encontrarse con la Virgen de Guadalupe del Ahuehuete.
Con ojos de asombro, los fieles -aunque intentaban ayudarla-, alentaban a doña Regina Balderas Medina, vecina de la comunidad de La Ladrillera en el municipio de Malinalco, quien sola se trasladó a este lugar y subió los 700 escalones para llegar a la virgen.
Pese a sus problemas para oír, doña Regina señaló que su fe es la que la mueve para acudir a este lugar y agradecerle a la virgen por permitirle llegar a esa edad y todavía subir y bajar mil 400 escalones para verla.
“Me llamo Regina y tengo 100 años, vengo a visitar a mi virgencita para saludarla y felicitarla en su día”.
“Viene solita, no viene con familia alguna. A todos nos sorprendió que a su edad haya subido los 700 escalones y tenga que bajarlos de nuevo, es un ejemplo de que la fe todo lo puede”, refirió uno de los encargados.
Devoción y sacrificio a la Virgen del Ahuehuete
Con devoción y mucho sacrificio al escalar 700 escalones, miles de devotos llegaron ante los pies de la Virgen del Ahuehuete y le agradecieron con flores, veladoras y lágrimas los favores recibidos, tal y como ocurrió con doña Regina Balderas, de 100 años de edad, que ayer llegó sola y cumplió su manda con la Virgen de Guadalupe.
A escasos 10 meses de su inauguración, el día de ayer acudieron miles de guadalupanos y escalaron 700 escalones para festejar con mañanitas, veladoras y flores a la llamada Virgen del Ahuehuete, una monumental imagen de 33 metros de altura creada por el escultor Víctor Gutiérrez.
“Esta virgen es nueva, pero hoy en su día ha recibido la visita de muchos devotos a quienes no les interesa que tengan que subir 700 escalones para llegar a sus pies y agradecerle o pedirle algunos favores”, dijo uno de los encargados que daba la bienvenida a los agotados guadalupanos que llegaban con el cansancio dibujado en su rostro.
Platicó que si bien a este lugar vienen muchos fieles de los municipios aledaños, han registrado visitas de gente de otros estados y países como Canadá, Estados Unidos, Colombia, Venezuela, Perú y Honduras, “poco a poco la virgen se está ganando la devoción de la gente y seguramente el año que viene será más la gente que venga”, añadió.
El encargado de la diócesis de Tenancingo, indicó que no hubo grandes festejos durante el día de ayer, sin embargo, la gente de la comunidad del Ahuehuete acudió a cantarle las mañanitas, música de banda y arreglos florales, “a las 14:30 horas se va a celebrar una mesa y luego la comida”, comentó mientras daba la bienvenida a los asistentes.
Una vez estando a los pies de la virgen, los devotos le prendían veladoras, le colocaban flores y algunos le lloraban en forma de agradecimiento por los favores recibidos, “le debo mucho a la virgencita y por eso vine cargando a mi pequeña hija. Me tardé mucho en subir pero aquí estoy para agradecerle”, comentó una mujer proveniente del municipio de Coatepec Harinas.