/ martes 1 de septiembre de 2020

Con opio, afganos sobreviven frente al Covid y la guerra

En una zona de constantes conflictos, la pandemia de Covid-19 complicó más la situación para los afganos, que se dedican a actividades ilícitas para subsistir

Muchos afganos que perdieron el empleo por la epidemia cultivan opio por necesidad de dinero, para sobrevivir este año.

"Debido al coronavirus, perdí mi trabajo. Tengo una familia de 12 personas que alimentar", cuenta Fazily, un mecánico de la provincia de Uruzgán, donde los empleos ya escasean en tiempos normales.

"No tengo otra opción más que trabajar en los campos de amapola para ganar dinero", justifica este hombre que, como muchos afganos, usa un sólo nombre.

Pese a miles de millones de dólares gastados a lo largo de los años por la comunidad internacional para erradicar las amapolas de donde se extrae el opio, Afganistán produce más de 80 por ciento del opio mundial. Cientos de miles de puestos de trabajo dependen de ello en este país pobre y devastado por el paro después de 40 años de guerras.

Una situación que ha empeorado. El confinamiento y la reducción del tránsito internacional debido al coronavirus han paralizado el comercio, obligando a muchos negocios a despedir a sus empleados.

La mayoría de los obreros agrícolas afganos dependen de los empleos estacionales en la primavera y el verano, los meses de cosecha, pero la pandemia ha impedido a muchos de ellos ir al campo.

Según un informe publicado en junio por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus sigas en inglés), ha habido escasez de obreros "en las provincias del oeste y del sur del país, generalmente debido al cierre de la frontera pakistaní".

Como las universidades y otros centros de enseñanza han cerrado, los estudiantes figuran entre las personas que han optado por ir a los campos de amapola para ganar algo de dinero.

"Nuestro centro está cerrado, y tengo tiempo suficiente para ir a trabajar a un campo de amapola y ganar dinero", explicó Nazir Ahmad, un estudiante de 18 años radicado en Kandahar.

"Unos 20 compañeros de clase también fueron a trabajar allí", agregó.

El ministerio de Salud afirmó en agosto que un tercio de la población afgana probablemente se haya contagiado.

El confinamiento de un mes por la pandemia, que ha afectado sobre todo a las grandes ciudades, se ha levantado progresivamente desde principios de agosto, y varios colegios, mercados y salones de bodas han reabierto.

Mohaiyudeen muestra opio cosechado en sus propias tierras en la provincia central de Nangarha / Foto: AFP

AMAPOLA O DESEMPLEO

A pesar de los programas de erradicación durante años, los afganos siguen cultivando la amapola y el gobierno y los talibanes suelen beneficiarse con su venta.

La mayoría de la producción se concentra en los bastiones talibanes, en el sur, pero también se cultiva opio a lo largo de la frontera paquistaní, en el este del país.

"No había trabajo, y muchas personas, como mis familiares y aldeanos, tuvieron que recurrir al cultivo de la amapola por culpa del desempleo", relató a la agencia AFP Musafir, un habitante del distrito de Khogyani, en la provincia de Nangarghat.

Los talibanes se aprovechan desde hace tiempo de la amapola imponiendo un impuesto a los agricultores y a los traficantes y gestionando sus propias fábricas de droga, donde transforman el opio en morfina o heroína, que luego exportan a través de Irán y de Pakistán.

Los donantes internacionales han gastado miles de millones de dólares por muchos años para combatir la producción de opio en Afganistán, intentando incentivar a los agricultores afganos a dedicarse a otros cultivos, como el azafrán.

Unos esfuerzos que no siempre han dado sus frutos y hoy es prueba de ello.

"Las medidas de erradicación forzada del opio no han funcionado en los últimos 18 años", declaró Hayatulá Hayat, gobernador de la provincia de Kandahar (sur).

"Desgraciadamente, Kandahar se enfrenta a un aumento del cultivo de amapola este año", agregó.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Acast

Google Podcasts

Deezer

Apple Podcasts



Lee también otros contenidos de Normal ⬇️

Muchos afganos que perdieron el empleo por la epidemia cultivan opio por necesidad de dinero, para sobrevivir este año.

"Debido al coronavirus, perdí mi trabajo. Tengo una familia de 12 personas que alimentar", cuenta Fazily, un mecánico de la provincia de Uruzgán, donde los empleos ya escasean en tiempos normales.

"No tengo otra opción más que trabajar en los campos de amapola para ganar dinero", justifica este hombre que, como muchos afganos, usa un sólo nombre.

Pese a miles de millones de dólares gastados a lo largo de los años por la comunidad internacional para erradicar las amapolas de donde se extrae el opio, Afganistán produce más de 80 por ciento del opio mundial. Cientos de miles de puestos de trabajo dependen de ello en este país pobre y devastado por el paro después de 40 años de guerras.

Una situación que ha empeorado. El confinamiento y la reducción del tránsito internacional debido al coronavirus han paralizado el comercio, obligando a muchos negocios a despedir a sus empleados.

La mayoría de los obreros agrícolas afganos dependen de los empleos estacionales en la primavera y el verano, los meses de cosecha, pero la pandemia ha impedido a muchos de ellos ir al campo.

Según un informe publicado en junio por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus sigas en inglés), ha habido escasez de obreros "en las provincias del oeste y del sur del país, generalmente debido al cierre de la frontera pakistaní".

Como las universidades y otros centros de enseñanza han cerrado, los estudiantes figuran entre las personas que han optado por ir a los campos de amapola para ganar algo de dinero.

"Nuestro centro está cerrado, y tengo tiempo suficiente para ir a trabajar a un campo de amapola y ganar dinero", explicó Nazir Ahmad, un estudiante de 18 años radicado en Kandahar.

"Unos 20 compañeros de clase también fueron a trabajar allí", agregó.

El ministerio de Salud afirmó en agosto que un tercio de la población afgana probablemente se haya contagiado.

El confinamiento de un mes por la pandemia, que ha afectado sobre todo a las grandes ciudades, se ha levantado progresivamente desde principios de agosto, y varios colegios, mercados y salones de bodas han reabierto.

Mohaiyudeen muestra opio cosechado en sus propias tierras en la provincia central de Nangarha / Foto: AFP

AMAPOLA O DESEMPLEO

A pesar de los programas de erradicación durante años, los afganos siguen cultivando la amapola y el gobierno y los talibanes suelen beneficiarse con su venta.

La mayoría de la producción se concentra en los bastiones talibanes, en el sur, pero también se cultiva opio a lo largo de la frontera paquistaní, en el este del país.

"No había trabajo, y muchas personas, como mis familiares y aldeanos, tuvieron que recurrir al cultivo de la amapola por culpa del desempleo", relató a la agencia AFP Musafir, un habitante del distrito de Khogyani, en la provincia de Nangarghat.

Los talibanes se aprovechan desde hace tiempo de la amapola imponiendo un impuesto a los agricultores y a los traficantes y gestionando sus propias fábricas de droga, donde transforman el opio en morfina o heroína, que luego exportan a través de Irán y de Pakistán.

Los donantes internacionales han gastado miles de millones de dólares por muchos años para combatir la producción de opio en Afganistán, intentando incentivar a los agricultores afganos a dedicarse a otros cultivos, como el azafrán.

Unos esfuerzos que no siempre han dado sus frutos y hoy es prueba de ello.

"Las medidas de erradicación forzada del opio no han funcionado en los últimos 18 años", declaró Hayatulá Hayat, gobernador de la provincia de Kandahar (sur).

"Desgraciadamente, Kandahar se enfrenta a un aumento del cultivo de amapola este año", agregó.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Acast

Google Podcasts

Deezer

Apple Podcasts



Lee también otros contenidos de Normal ⬇️

Local

Pide magisterio salario justo y basificación urgente

Solicitan actualizar reglamentos; la gobernadora se compromete a escucharlos

Local

Por primera vez realizarán voto anticipado en penal del Altiplano

La jornada se llevará el 11 y 12 de mayo; 118 personas en prisión preventiva emitirán su voto para elegir al próximo presidente o presidenta de México

Local

Mejora la percepción de la seguridad en Edomex: INEGI

Según la encuesta trimestral de Seguridad Urbana, el desempeño de la percepción de la Policía Estatal en zonas urbanas tuvo un incremento del 7.8% en comparación con diciembre de 2023

Local

¿Cuál es el primer paso para tramitar tus escrituras o tu título de propiedad en el Edomex?

Dicho documento genera beneficios como el acceso a servicios públicos, incrementar el valor del predio o del bien inmueble y contar con la posibilidad de solicitar opciones de crédito

Local

Llegará con retraso la temporada de lluvias este año

Abril y mayo cerrarán con déficit en precipitaciones

Local

Buscará PVEM un millón de votos y ser segunda fuerza en Edomex

Rechaza problemas con sus aliados por la llegada de Eruviel Ávila y niega acuerdos con el hijo del ex alcalde de Toluca