Tlalnepantla, México.- Según un estudio del Centro de Atención Ciudadana contra las Adicciones, el 38 por ciento de la población penitenciaria recluida en las cárceles mexiquenses, cometió el delito por el que purgan una condena bajo los efectos de las drogas.
De ese total, el 79 por ciento de los casos prevaleció el alcohol y un buen porcentaje, sin precisar cifras, cometió el ilícito para obtener recursos y con ellos poder comprar las drogas, detalló Julia Mendoza, funcionaria de esta ONG.
Advirtió que el consumo de sustancias psicoactivas en los municipios más poblados como son Ecatepec, Nezahualcóyotl y Tlalnepantla, "es un problema de salud pública e inseguridad que afecta a las personas que consumen, a sus familias, a su entorno escolar o laboral y a todo el entorno social".
También, el consumo entre menores de edad y mujeres, crece y las principales causas de muerte en los jóvenes son hechos violentos, por agresiones, accidentes o por lesiones auto infligidas, como suicidios, y todos estos decesos fueron propiciados o favorecidos por el consumo o abuso del alcohol o el consumo de otras drogas.
Dijo que en un gran número de detenciones en municipios mexiquenses la mariguana estuvo involucrada en 85 por ciento de los casos, por lo que es el tema más importante; el 65 por ciento de los detenidos tenían menos de 27 años, 32 por ciento entre 18 y 22 años y 14 por ciento eran menores de edad.
Agregó que "existe una gran cantidad de datos y estadísticas sobre el tema, sin embargo, las cifras anteriores confirman la importancia del problema, y nos comprometen a ejercer por la vía interinstitucional las acciones tanto preventivas como las que buscan remediar esta situación en la entidad”.
Otro aspecto que mucho lastima a la sociedad, dijo Mendoza, es que tanto los implicados en el delito de narcomenudeo como las principales víctimas de las adicciones son jóvenes e incluso niños.
Aseguró que el relevo generacional se ve seriamente amenazado por esta situación, ya que las y los jóvenes adictos no rehabilitados seguirán siendo presa fácil de la delincuencia organizada.