Por Danytza Flores
Veracruz, Ver..- Los cruceros de avenidas importantes o en lascercanías de las vías del tren de la ciudad de Veracruz se hanconvertido sitios concurridos por personas que dicen ser migrantescentroamericanos y piden unas monedas a los automovilistas.
Pero se trata de estafadores, aseveró Jeremías ZúñigaMezano, presidente del Consejo de Participación Cívica, pues lamayoría son mexicanos que encontraron de esta forma una manera deganarse la vida.
El especialista señaló que solo 7% de todas esas personas quepiden dinero presentándose como ciudadanos de algún paíscentroamericano puede acreditar su nacionalidad.
El resto son hombres y mujeres de Veracruz o de estados de laRepública vecinos como Oaxaca y Chiapas, que se visten con ropassucias y cambian su acento o tono de voz para aparentar quenecesitan ayuda.
“Realmente un centroamericano cruza por acá sólo para llegara su destino que es la frontera norte del país, no permanecenmucho tiempo y en pocas ocasiones se arriesgan a ser detenidos poroficiales de migración y por eso tratan de no pedir dinero en lacalle”, declaró Zúñiga Mezano.
El experto en consultoría política y de seguridad advirtióque esta situación es un problema social grave, ya que muestra quecada vez son más las personas que se hacen valer de la necesidadde otros para conseguir dinero sin trabajar.
Pero al mismo tiempo, la presencia de personas pidiendo limosnaen la vía pública sin necesitarlo podría generar problemas deinseguridad como ha ocurrido en otras zonas del país.
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“En Puebla y la Ciudad de México se han dado casos en los queestas personas que se dedican a pedir dinero en los cruceros hanparticipado en actividades ilícitas como robos. En Veracruz lovemos con preocupación porque cada vez son más y se ha notado queen algunos casos son personas que prestan mucha atención a lo quelos automovilistas llevan a bordo para ver si pueden robarlo (…)Pero además podrían o son contratados por carteles de la drogacomo informantes y reportar todo el movimiento que vean”,declaró.
El especialista reconoció que el Instituto Nacional deMigración (INM) no cuenta con la obligación legal para retirar alos estafadores de la vía pública, pues al tratarse de mexicanosestá fuera de su jurisdicción.
“La gente de Migración (INM) sabe bien cómo identificar a unmigrante centroamericano, es por eso que no se molesta en realizarlos operativos, pero en aquellos casos en los que se llevan a cabotampoco pueden detenerlos porque resulta que son mexicanos”,declaró.
En ese sentido, señaló que es responsabilidad del Ayuntamientoretirar de la vía pública a los timadores que se hacen pasar porguatemaltecos, hondureños y salvadoreños, pues si bien no es undelito en las leyes estatales o federales, lo establece el BandoMunicipal de Policía y Buen Gobierno.
Gerson Malpica, originario de San Pedro Sula, Honduras, seencuentra de paso junto con su esposa e hijo por Veracruz paracruzar hacia Estados Unidos, señaló que en su camino muchaspersonas se han negado ayudarlo a él o al grupo de migrantes conel que viaja porque desconfían que sea realmente un ciudadanohondureño.
“Muchas veces me dicen si de verdad soy hondureño, porquedesconfían mucho, hemos recibido mucha ayuda pero también a vecesnos dan con desconfianza”, declaró.
Incluso cuenta que muchos mexicanos se tratan de mezclarse conellos cuando llegan a algunas ciudades y los incitan a pedirlimosnas en la vía pública, para verse también beneficiados.
“Cuando hemos intentado pedir dinero la policía siempre noscorre porque dicen que estamos molestando a la gente, nos insultany nos piden que regresemos a nuestro país, pero yo veo mucha gentepidiendo dinero y no les dicen nada”, declaró.
Si bien señala que es más fuerte la solidaridad de lapoblación mexicana, consideró como una falta de moral que existaquien se aproveche de la necesidad para ganar dinero sin trabajarpara ello.
Sobre este asunto el Instituto Nacional de Migración, a travésde su oficina de Comunicación Social en la delegación Veracruz,confirmó que la dependencia federal ha realizado operativos endiversas ocasiones para verificar si las personas que piden limosnaen los cruceros o en las vías del tren son ciudadanoscentroamericanos.
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Sin embargo, en los últimos tres años sólo se ha detectado ados personas que logran acreditar su origen centroamericano, enestos casos se ha buscado ayudarlos para legalizar su situación enel país sin necesidad de repatriarlos a su lugar de origen.
Pero el resto de las personas que se observan solicitando dineroson mexicanos que piden a los automovilistas, en estos casos no seles puede detener o pedirles que se retiren.
No obstante, dentro de los operativos que se realizan se trabajade manera conjunta con otros organismos de gobierno como el SistemaDIF estatal, personal de Seguridad Pública, Derechos Humanos yhasta Protección Civil, para retirarlos de la calle o atendercualquier necesidad que requieran.
En ese sentido, el INM sólo advirtió a la población que en sugran mayoría son estafadores que lucran con la compasión de laspersonas y recomienda que se evite apoyar con dinero a quien sedice ser migrante centroamericano de paso por territorioveracruzano.
