Las condiciones laborales a nivel global han experimentado cambios importantes a raíz de la pandemia de Covid-19, de la cual México no estuvo exento y que ha generado una nueva de forma de establecer relaciones entre los colaboradores y los empleadores
En nuestro país, quizá uno de los hechos más relevantes es el dato de que, hasta un 75 por ciento de los trabajadores del sector formal mexicano aprueba estar bajo un esquema de trabajo flexible, mientras que en lo que respecta a los empleadores, un 76 por ciento de ellos tienen la misma opinión en este sentido.
A la par de esta nueva estructura dentro del sector laboral, en los últimos 12 meses, los correspondientes a 2023, se ha observado una reducción de 1.3 puntos porcentuales en la tasa de informalidad en México; esto con base a cifras extraídas de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Esta tendencia se ha alineado de manera positiva con la fortaleza de la ocupación formal durante 2023; ya que durante este año se sumaron 1.1 millones de personas a la población ocupada en el sector formal.
En resumen, el empleo informal en México ha mantenido una tendencia a la baja. Durante diciembre de 2023 cerró en una tasa de 53.6 por ciento, lo que representa el nivel más bajo desde que se tienen registros, sin tomar en consideración el periodo de pandemia por Covid-19 debido a las afectaciones y cierres en el sector productivo que ésta generó.
Con estas cifras que nos dan una radiografía de lo que sucede en torno al mercado laboral nacional, podemos resaltar la importancia de trabajar en concretar empleos flexibles a las necesidades de las personas y del sector productivo. Contar con empleos formales generan estabilidad no sólo para el colaborador si no, para las personas que dependen económicamente de él, asimismo, las prestaciones brindan un respaldo ante sucesos inesperados, los esquemas de adquisición de vivienda fomentan el desarrollo y en conjunto generan bienestar social dentro de la comunidad.
2023 ya representó un parteaguas para todo el sector productivo y la población en edad productiva gracias a que este fue el primer año con una auténtica recuperación económica tras la pandemia. Hoy gracias a las nuevas formas de trabajo que surgieron gracias al Covid-19 como la flexibilidad laboral, hoy tenemos la oportunidad de realizar home office y trabajo en sitio de manera alternada, lo que genera comodidad entre las y los colaboradores.
Pese a que las expectativas y las áreas de oportunidad son altas, sociedad y autoridades debemos seguir trabajando para garantizar el bienestar de hombres y mujeres que desean integrarse a la formalidad y promover el bienestar de todos los mexicanos.
Gilberto Javier Sauza Martínez / Vicepresidente de CONCAEM
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