¡Maratón!, ¿conoces la leyenda de esta prueba atlética?

La competencia estelar del atletismo tiene sus orígenes en la antigua Grecia

Domingo Fernández | El Sol de Toluca

  · sábado 21 de enero de 2023

FOTO | EFE

El maratón es la prueba estelar del atletismo, los corredores tienen que cubrir una distancia de 42 kilómetros con 195 metros y aunque es un difícil reto para el cuerpo humano cada vez más atletas se suman para buscar su mejor tiempo ya sea por una exigencia personal o para figurar en los mejores eventos mundiales, sin embargo ¿cuál es el origen de esta competencia?.

Sus orígenes se remontan a la antigua Grecia, el mito dice que el nombre de Maratón proviene de la leyenda de Filípides, un mensajero (aunque también se dice que era un soldado) que habría sido enviado desde Maratón a Atenas para anunciar la victoria de su ejército frente a los persas en la Batalla de Maratón en el año 490 antes de Cristo.

Pero tan pronto como llegó para entregar el mensaje el corredor debido al enorme esfuerzo no pudo más y cayó sin vida.

No obstante la realidad que se vivió en la batalla de Maratón fue distinta, el mensajero había corrido hasta Esparta para pedir auxilio, ya que los persas superaban en número a los atenienses. Esto significa que Filípides había cubierto una distancia aproximada de 240 kilómetros en tan solo dos días, esa es la razón de que su cuerpo no pudo soportar el esfuerzo y murió.

Durante los Juegos Olímpicos modernos celebrados en Atenas en 1896, los organizadores buscaban un gran evento que recordara la gloria de la Grecia antigua y surgió la idea del mito de Filípides y la Batalla de Maratón.

El 10 de abril de 1896 se llevó a cabo el primer maratón olímpico y su ganador fue Spyridon Louis, un griego que corrió desde la llanura de Maratón hasta el estadio olímpico de Atenas, una distancia 40 kilómetros con un tiempo de 2:58:50.

La distancia se modificó en 1908 para la edición de la justa olímpica en Londres, para que la carrera iniciara en el Castillo Windsor (y la Reina pudiera observar la salida) y la meta en el Estadio Olímpico, los organizadores se vieron obligados a extender la distancia a los extraños 42.195 metros.

Aunque fue hasta 1921 cuando la distancia quedó oficialmente asentada por la Asociación Internacional de Federaciones Atléticas.