Tultitlán, México.- Enriqueta Vargas, líder del Templo de la Santa Muerte Internacional, murió la noche del martes tras perder la batalla contra el cáncer.
También conocida como “la señora Queta”, asumió el liderazgo de este templo ubicado en los límites de los municipios de Tultitlán y Coacalco tras el asesinato de su hijo Jonathan Legaria Vargas, comandante pantera o padrino, ocurrido el 31 de julio del 2008.
Durante su gestión logró que este culto fuera reconocido por la Secretaría de Gobernación, consiguió que en los penales más peligrosos se oficiaran misas dedicadas a la “Niña Blanca” y fomentó el culto en Centroamérica y Estados Unidos.
Su cuerpo será velado en el templo donde se encuentra la imagen más grande del mundo de la Santa Muerte, la cual tiene una altura de 22 metros.
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