Los niños y niñas tienen mayor riesgo de enfermar de manera grave de contraer la viruela símica, también denominada como “viruela del mono”, por la cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó una emergencia de salud internacional.
Información de esa organización actualizada al 4 de agosto de este año indica que los niños y niñas pueden contraer dicha enfermedad por contacto físico directo con alguien que tiene síntomas.
De acuerdo con los datos recabados en los países con mayor incidencia de contagio de viruela símica, los niños suelen ser más propensos al cuadro grave de la enfermedad que los adolescentes y los adultos, sin embargo, el número de contagios en menores de edad es bajo.
Debido a su similitud con otras enfermedades infantiles comunes, como la varicela y otras infecciones víricas, la OMS recomienda que en caso de detectar a un menor con sintomatología relacionada con la viruela del mono se acuda con el médico de cabecera, con el objetivo de brindar atención oportuna al paciente.
Embarazo y la lactancia
La Organización Mundial de la Salud indica que todavía no hay antecedentes ni estudios suficientes para indicar la gravedad de que una mujer embarazada se contagie de viruela símica, o cómo el virus puede transmitirse al feto en el útero o al recién nacido durante o después del nacimiento, o durante la lactancia.
Sin embargo, las evidencias recabadas a la fecha indican que el feto correría peligro si su gestante contrae la enfermedad, motivo por el cual ese organismo de salud exhorta a las mujeres que están en periodo gestante, evitar el contacto directo con pacientes diagnosticados.
Tampoco se cuenta con evidencia suficiente sobre los peligros que implican continuar la lactancia una vez que la madre sea diagnosticada con viruela del mono.
“Todavía no se sabe si el virus de la viruela símica se puede transmitir de padres a hijos a través de la leche materna; se trata de un ámbito que necesita más estudios”, indica la OMS a través de su sitio web.
Cabe recordar que la viruela símica es una infección zoonótica vírica, es decir, puede transmitirse de animales a humanos, pero también de humanos a humanos.
Entre los síntomas de la viruela del mono destacan la fiebre, la cefalea, dolores musculares, dolor de espalda, falta de energía y ganglios linfáticos inflamados, así como una erupción que puede durar de dos a tres semanas.
La erupción se puede ubicar en diversas partes del cuerpo, como lo son la cara, las palmas de las manos, las plantas de los pies, los ojos, la boca, el cuello, la ingle y las regiones genitales o anales del cuerpo.
El periodo que la sintomatología puede prevalecer va de las dos a tres semanas, y en términos generales desaparecen por sí solos o con medicamentos para el dolor o la fiebre.
Los pacientes diagnosticados con viruela símica se consideran infecciosas hasta que todas las lesiones se han cubierto de costras, las costras se han caído y se ha formado una nueva capa de piel debajo.
Hasta el 28 de julio pasado el Estado de México contabilizaba cinco casos confirmados de viruela símica, de los cuales dos estaban en Toluca, uno en Texcoco, uno en Zumpango y uno en Nezahualcóyotl, según reportes de la Secretaría de Salud estatal.
