"Los mosquitos" resisten al Covid-19.
La tradición de producir el único licor de distintas graduaciones de Toluca, combinado con promociones y el servicio a domicilio, son parte de su fórmula para enfrentar la pandemia.
La familia Almazán es propietaria de "La Miniatura" y autora del licor "El Mosquito". Este negocio se encuentran ubicado en Los Portales de Toluca.
Hoy luchan contra el virus y la crisis económica que trajo la pandemia. Pero siendo de los locales más antiguos de Los Portales han sabido cuidar a sus clientes.
Rocío Mendoza, la gerente de "La Miniatura", comentó que han instrumentado ofertas que se ofrecen a los clientes.
"Se ofrece cóctel con hielo, pulpa de fruta, arándano y kiwi de dos a tres de la tarde", informó.
También ofertan copitas de a dos por una, las cuales pueden ser de cítricos, hierbas y canela. Son las promociones emergentes por el Covid-19.
La pandemia les obligó al cierre durante cuatro meses, pero luego el local ubicado en el número 39 de Los Portales volvió a abrir para sus clientes, los cuales siguen llegando de diferentes partes del país y el estado.
TRADICIÓN
El único licor de distintas graduaciones, conocido como "El Mosquito", se vende en "La Miniatura" desde 1933.
"Todo empezó con mi abuelo a quien los trabajadores de fábricas y otros consumidores de ese entonces le pedían bebidas más fuertes y le surgió la idea de hacer el licor por graduaciones.
"Entonces cuando los probaban decían que estaba fuerte y les picaba, pero querían más y ahí quedaban picados y fue como le quedó el nombre, pero hasta 1933 se registró la marca", explicó Martha Almazán Contreras, la actual productora del licor toluqueño.
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Don Alfonso Almazán, un licorero artesanal de Valle de Bravo, fue quien inició la historia de "El Mosquito" con su pequeña fábrica que luego instaló en Toluca, donde atendía a los más exigentes clientes que buscaban quitarse el frío que bajaba desde lo alto del Nevado.
“Mi abuelo fue el iniciador, pero luego mi padre que se llamaba José Luis continuó con la producción, era el más chico de los hijos”, recordó Martha.
Lo particular en este licor, elaborado con naranjas traídas desde Veracruz, son sus graduaciones, similar a los mezcales, las cuales van desde los sabores más suaves hasta los que realmente se sienten como el piquete de mosquito.
Este sabor tradicional sigue vigente.