A más de un mes de haber cambiado a la fase amarilla en el semáforo epidemiológico en la entidad, comerciantes de alimentos, artesanías y textiles en el poblado de Santa Martha señalaron que han registrado una lenta recuperación.
Algunos declararon que, pese a que sí han registrado un incremento en sus ventas, no han podido recuperar el nivel de ventas que registraban antes de la pandemia por lo que sólo tienen algunas ventas altas durante los fines de semana.
De acuerdo con Humberto Domínguez, habitante del lugar y comerciante de alimentos, pese a la difícil situación económica por la que atraviesan no pierden las esperanzas de lograr una recuperación total.
No puedo decir que no vendemos nada, pero no hemos logrado igualar las ventas que teníamos antes de la pandemia.
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Automovilistas, los mejores clientes
A decir de las personas consultadas sobre la carretera Ocuilan-Tianguistenco, los mejores días de venta son los viernes, sábados y domingos ya que en ese periodo hay mayor tránsito de automovilistas los cuales se dirigen al Santuario de Chalma e incluso hacia las Lagunas de Zempoala y Cuernavaca.
Tenemos que aprovechar sobre todo los sábados y domingos, es cuando hay más gente que transita.
Epifania Domínguez, comerciante de artesanías y habitante del lugar.
Aunado a esto, recordó que mientras mayor variedad de artículos ofertan sus ventas pueden incrementar sus posibilidades de ventas. “Yo lo que más vendo son las macetas, los rehiletes y también las figuritas de animales, ya si veo que se animan con algo les hago una oferta para que el cliente se vaya contento y yo también gane”, explicó la entrevistada.
Otros artículos que están a la venta en distintos puestos colocados a pie de carretera son los papalotes gigantes con forma de aves y alcancías así como mecedoras infantiles en forma de animales como vacas, dinosaurios y caballos.
A la lista se suman artículos textiles, como chalecos, sudaderas, ponchos, calentadores, guantes y gorros, entre otros.
Cabe resaltar que con el paso de los años, y ante el incremento de la afluencia vehicular en la zona, cada vez son más los puestos de artesanías y textiles que se colocan así como las cabañas adecuadas como restaurantes familiares sobre la carretera Ocuilan-Santiago.
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