El Estado de México enfrenta una problemática ambiental donde se agrava la mala calidad del aire en sus distintas ciudades, mientras disminuye la disponibilidad de agua potable, aunado a la erosión de los suelos.
Por ejemplo, en contaminación atmosférica el valle de Toluca, durante 2016, registró 212 días con mala a extremadamente mala calidad del aire. En el valle de México, en ese mismo año, se contabilizaron 280 días en esa situación, de acuerdo con el Plan de Desarrollo del Estado de México (2017-2023).
Dicha situación fue similar en 2017 y entre el 14 y 18 de mayo de 2019 el valle de Toluca vivió su primera contingencia por contaminación atmosférica, lo cual marcó precedente sobre el nivel de polución que se respira en la zona centro la entidad.
En el "Pilar Territorial Estado de México ordenado, sustentable y resilente”, dicho documento señala que la erosión de los suelos va en aumento, lo cual no sólo afecta a las actividades agrícolas y ganaderas, sino también a las condiciones ecológicas.
El citado plan señala que la entidad, en el ámbito nacional, cuenta con el mayor número de áreas naturales protegidas, al sumar 97, lo cual representa una superficie de un millón 127 mil 816.21 hectáreas, aproximadamente 44% de su territorio, varias de las cuales colindan con zonas urbanas.
Entre las prioridades ambientales del referido plan destaca que se debe transitar a un sistema degeneración de energías limpias y no contaminantes, desarrollar acciones encaminadas a la mitigación y adaptación al cambio climático, además de garantizar la sustentabilidad de los ecosistemas y la preservación de la biodiversidad, así como responder a los retos que representan los asentamientos humanos y la concentración espacial de actividad productiva.
AGUA
En el Estado de México, con cifras de2018, la cantidad disponible de agua era de 350 metros cúbicos por habitante al año, lo cual implica un menor nivel respecto al promedio nacional.
En tanto que la cobertura desplegada de agua potable, en 2017, fue de 97.5%, que benefició a una población de 16 millones 929 mil 303 habitantes. Esta tasa es mayor a la registrada en los cinco años anteriores, puntualiza el citado documento.
No obstante, en las proyecciones se estima que para 2023 dicha cobertura deberá ser del 98.5%, lo cual significa un abasto para 18 millones 469 mil 118 habitantes.
El gobierno estatal contempla para la conservación de cuencas hidrológicas distintas acciones, entre ellas, promover la eficiencia operativa y presupuestal de los organismos operadores de agua potable, incrementar la capacidad de tratamiento de aguas residuales, y modernizar las instalaciones actuales, en particular, las ubicadas en el Río Lerma.
BOSQUES
En el plan de desarrollo se apuntan los problemas que aquejan a los bosques, tal es el caso del crecimiento de la frontera agrícola, la presencia de incendios, y plagas que afectan la cobertura forestal de la entidad.
Entre 2011 y 2016, señala, la afectación en el estado por incendios fue de 31 mil 220 hectáreas y por plagas de insectos descortezadores se perdieron 8 mil 942 hectáreas, equivalente a 1.35% de los bosques de clima templado.
