La vialidad José López Portillo, que conecta hacia la carretera Toluca-Naucalpan y es una de las principales salidas de la capital mexiquense, se ha vuelto la más lenta y caótica debido a la invasión de puestos ambulantes.
Mediante un recorrido hecho por la zona, se pudo observar que el tramo más invadido con los puestos es del cruce con el Bulevar Aeropuerto, hasta la entrada a la Central de Abastos.
Según el conteo en dicho tramo se instalan al menos 30 puestos ambulantes de vendedores.
En su mayoría, son puestos que venden fruta, algunos que ofertan accesorios de limpieza, de vehículos y utensilios de aluminio.
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Asimismo, se suman otros puestos, como los que ofrecen comida, algunos viveros, los cuales, aunque no colocan su mercancía sobre el pavimento, obstruyen el paso peatonal.
Incluso, se pudo observar que en los puentes peatonales las personas usan los espacios comunes para vender ropa.
Días de mayor caos
Los sábados es cuando hay mayor conflicto vial en dicha avenida, debido a la entrada y salida de comerciantes a la Central de Abastos.
Debido a que los comerciantes acuden a surtir sus tiendas, a partir de las 5:00 horas y hasta después de las 10:00 horas, la avenida presenta un gran congestionamiento.
Entre semana, la vía se vuelve lenta durante las mañanas, cuando las personas entran a sus labores y al mediodía, en la hora pico de las salidas de las escuelas.
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Zonas más invadidas
Los lugares más invadidos son los pasos peatonales, donde los ambulantes colocan sus mercancías e incluso los locales establecidos aprovechan para ampliar sus espacios de venta, pese a que está prohibido invadir los andadores con cualquier tipo de objeto.
Asimismo, los comerciantes de fruta aprovechan los carriles laterales para estacionar sus camionetas y colocar su producto para ponerlo a la venta.