Ante el brote de rabia paralítica bovina en cabezas de ganado en la región sur del Estado de México, expertos recomendaron no dejar de consumir la carne de res, pues esto perjudica a los productores, elevando sus costos.
Así lo refirió la Asociación de Ingenieros Agrónomos Independientes del Estado de México, quien, a través del ingeniero Julio César Contreras Taboada, recomendó comprar en centros de confianza, mismos que deben de contar con las medidas de sanidad necesarias, sugiriendo no comprar la carne de res en comercios sin ninguna línea de trazabilidad.
"Que conozcan que son personas las que están comprando animales de rastro, certificados y sellados, ubiquen estos lugares de carniceros y que en verdad estén comprando ganado sano", explicó Contreras Taboada.
Y es que, desde el pasado 25 de agosto, autoridades municipales de Texcaltitlán advirtieron sobre un posible brote de rabia paralítica bovina, identificado en dos comunidades del municipio.
Por lo que, dejar de comprar este producto, puede encarecer el precio del mismo.
"Habrá una merma en los productores de carne de Texcaltitlán porque los productores van a tener miedo en ver a quién compran, o ver si su ganado está libre de este virus", describió.
En entrevista con este medio, recomendó verificar que la carne que se compre en la región tenga un buen color y olor, así como que el lugar donde se compra cumpla las condiciones de higiene necesarias, pues son las recomendaciones que se dan para cualquier tipo de compra de carne.
Baja presencia del virus
Explicó también que el Estado de México no es una región con altos índices de ganado bovino infectado por la rabia paralítica, aunque en los últimos años ha habido un incremento de casos.
"A pesar de que en el Estado de México estamos, aparentemente, libres de la rabia paralítica bovina, hemos tenido una presencia de cuatro a cinco casos anuales. No ha sido tan al alza, pero en los últimos años ha habido un incremento", precisó.
Esto se debe a las condiciones climatológicas de la región conocida como Tierra Caliente, la cual se comparte con municipios del sur de la entidad mexiquense, el norte de Guerrero y el noreste de Michoacán.
"En Tierra Caliente es donde se dan las condiciones climáticas para la presencia de murciélagos o inclusive perros que pudieran tener rabia", explicó.
Consideró que, si bien no son muchos los casos que se presentan en la entidad como en el sureste del país, "no se debe de tomar a la ligera este tipo de brotes", pues se debe buscar prevenir un alto número de cabezas de ganado contagiadas.
"Considero que puede existir un riesgo como todo brote infeccioso, significa una alerta por mínima que sea, hay que analizar las condiciones por las cuales se dieron y en este caso, hay que ver las condiciones de los murciélagos que han estado atacando al ganado", describió.
Si no se controla, ni se monitorea a tiempo, puede crecer el contagio en la región, por lo que destacó el control aplicado en 10 kilómetros a la redonda por parte de las autoridades de sanidad.
"Todos los municipios deben de tener un trabajo sólido, a través de sus áreas correspondientes en el monitoreo de los datos de cada municipio", aseguró.
Por último, el entrevistado pidió a la sociedad en general investigar más sobre el tema en fuentes oficiales del sector gubernamental, con el objetivo de no caer en la infodemia de las redes sociales y que ésta genere pánico social.
"Que la gente vaya por información correcta, que no se confíe por información que dé por hecho un brote para espantarnos y no comprar carne", invitó.
De acuerdo con la Asociación de Ingenieros Agrónomos Independientes de la entidad, la región ganadera del sur mexiquense se ha fortalecido en los últimos años.
Con ello, ha habido mayor interacción entre productores ganaderos de la región al expandir su producción y mercado de venta en los municipios de Luvianos, Tlatlaya, Tejupilco, Texcaltitlán, entre otros.
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