El Partido Revolucionario Institucional, en sus tres etapas de vida, 1929 Partido Nacional Revolucionario (PNR); 1938, Partido de la Revolución Mexicana (PRM); 1946, Partido Revolucionario Institucional (PRI), cumplió el pasado miércoles 4 de marzo 91 años de existencia.
En la cotidianidad de la vida pública se entiende al Partido Político, a aquella organización, que por la vía pacífica trata de alcanzar el poder político; sin embargo los estudiosos de la ciencia política le han agregado al concepto del Partido Político, no solamente el aspecto anterior, sino que es una organización que posee principios, acciones, procedimientos, estructura; para competir por el poder y una vez que se alcanza (el poder) hacerlos programa de gobierno; es decir, atributos que el partido político va adquiriendo en la legitimación ciudadana.
Quizá el primer objetivo del PRI fue el alcanzar el poder, por la vía pacífica, sin embargo, para el PRI, esto no lo es todo, pues antes que ello se encuentra la declaración de principios; el programa de acción y la plataforma política que han hecho que el partido, la mejor estructura política del país.
El PNR reconoció que la lucha armada de la revolución lo importante era lograr la conciencia nacional y el arraigo ideológico, pero sobre todo alfabetizar a la población (México tenía el 85% de la población analfabeta) para emprender la reconstrucción nacional, el PNR tenía como objetivo fundamental, el de mantener permanentemente, el orden legal, creado por el triunfo de la revolución, consolidar cada día la doctrina y las conquistas de la revolución.
El PRM surge por la necesidad de fortalecer la unidad nacional, ante la expropiación petrolera, debiendo constituir una gran alianza con los sectores revolucionarios, es así que el 30 de marzo de 1938 se realiza un pacto de unión y solidaridad, teniendo como objetivo la implantación de un sistema de producción más justo y continuar por la vía pacífica hacia la democracia social.
El PRI surge el 19 de enero de 1946 bajo el lema de Democracia y Justicia Social teniéndolo como postulado máximo, pero además reconoció que los ideales de la revolución debían de plasmarse en instituciones para formar parte de la vida nacional, y teniendo como principios, entre otros, los siguientes: ¡Obtener la unificación proletaria, apoyando la educación cívica y la preparación política del pueblo! e ¡Incrementar los niveles de salud, higiene y vivienda, así como la soberanía nacional!
El México de hoy a 91 años de distancia de la fundación del partido es muy diferente al posrevolucionario, este es un México plural; de una sociedad más avanzada y más demandante, de una sociedad heterogénea que exige mejores condiciones de vida, además existe una real y auténtica competencia política.
La militancia del partido cada día está más escéptica ante la situación actual del partido, sin ideales políticos, sin trabajo de base, como que las dirigencias aún no se han dado cuenta que el PRI ya no es partido hegemónico y ni mayoritario.
Que los números fríos son que actualmente tiene sólo 12 gobernadores; 14 de 128 senadores; 47 de 500 diputados; 584 ayuntamientos de 2 mil 458; sólo 183 de mil 112 diputados locales; y cada día más priistas renuncian a su militancia sinceramente los neo- priistas han tratado de acabar con el partido, los militantes hemos sido los más sorprendidos con los nombramientos de Enrique Ochoa Reza como presidente del PRI y de José Antonio Meade como candidato a la presidencia de la República, descomponiendo la otrora maquinaria priista.
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