/ miércoles 22 de mayo de 2024

Repique inocente | Un mundo de dinero

No sé que pensarán mis estimados y nunca mal ponderados cuatro lectores, pero 37 mil 430 pesos por mexicano es una lana. Se trata de una suma de 4.9 billones de pesos. Eso es lo que costó la violencia en México en el año 2023, según el Instituto Para la Economía y la Paz.

Esta organización con sede en Australia tuvo a bien informarnos que el peso económico de la violencia es el equivalente a la quinta parte de la economía nacional. El 19.8 por ciento del Producto Interno Bruto. Es decir un titipuchal de dinero.

Para que sirva de referencia, el informe indica que el impacto económico de la violencia fue casi seis veces mayor que las inversiones públicas realizadas en salud y más de cinco veces superior a las realizadas en educación en 2023. Y también dice que el año pasado, los homicidios constituyeron el 42.5 por ciento del impacto económico de la violencia. Los 30 mil 558 asesinatos ocurridos en 2023 significaron el equivalente a 2.1 billones de pesos (unos 104 mil millones de dólares). O puesto en numerario, 68 millones de pesos por cada asesinato… Cosa que al arriba firmante le parece una exageración, pero los números no mienten.

El Instituto Para la Economía y la Paz señala que la violencia y el miedo a la violencia generan importantes costos “en forma de daños a la propiedad, lesiones físicas y trauma psicológico”, alteran el comportamiento económico “al cambiar los patrones de inversión y de consumo, lo que desvía recursos públicos y privados de las actividades productivas hacia medidas de protección”, generan pérdidas significativas “en forma de déficit de productividad, pérdida de ingresos y gastos irregulares”.

Y asegura que los costos de la violencia en México son significativamente mayores que los gastos del gobierno en la contención de la violencia. En 2023, “el 19.9 por ciento del impacto económico de la violencia en México fue en gastos gubernamentales y gastos de protección privada”. El restante 80 por ciento corresponde al costo de los homicidios, delitos con violencia, crímenes de la delincuencia organizada y miedo a la violencia.

El Estado Libre y Soberano de México, la prepotente existencia moral en la que vivimos, es una de las entidades que se ubican en la parte baja de la tabla del Índice de Paz de México. Es decir, está entre los menos pacíficos del país. Colima, con una calificación de 4.742, es el más violento. Yucatán, con su 1.314, es el más pacifico. El estado de México está en el lugar 24, con una calificación de 3.446, dada por una ponderación de los homicidios, delitos con violencia, delitos cometidos con arma de fuego, crímenes de la delincuencia organizada y miedo a la violencia. Tuvo una ligera mejoría, subiendo tres escalones en el último año.

Y dos municipios mexiquenses, Ixtlahuaca y Metepec, están entre los municipios con las tasas de homicidios más bajas del país. Ixtlahuaca en el lugar 9 y Metepec en el escalón 25.

La entidad mexiquense, por cierto, tiene un costo de la violencia como porcentaje del PIB entre 15 y 19 por ciento, en sintonía con el indicador del país. Un costo alto: al menos uno de cada seis pesos que produce la economía mexiquense. Un mundo de dinero.

Director del noticiario Así Sucede de Grupo Acir Toluca. Gerente de Meganoticias Toluca.

Tips: felgonre@gmail.com. Twitter: @FelipeGlz.

No sé que pensarán mis estimados y nunca mal ponderados cuatro lectores, pero 37 mil 430 pesos por mexicano es una lana. Se trata de una suma de 4.9 billones de pesos. Eso es lo que costó la violencia en México en el año 2023, según el Instituto Para la Economía y la Paz.

Esta organización con sede en Australia tuvo a bien informarnos que el peso económico de la violencia es el equivalente a la quinta parte de la economía nacional. El 19.8 por ciento del Producto Interno Bruto. Es decir un titipuchal de dinero.

Para que sirva de referencia, el informe indica que el impacto económico de la violencia fue casi seis veces mayor que las inversiones públicas realizadas en salud y más de cinco veces superior a las realizadas en educación en 2023. Y también dice que el año pasado, los homicidios constituyeron el 42.5 por ciento del impacto económico de la violencia. Los 30 mil 558 asesinatos ocurridos en 2023 significaron el equivalente a 2.1 billones de pesos (unos 104 mil millones de dólares). O puesto en numerario, 68 millones de pesos por cada asesinato… Cosa que al arriba firmante le parece una exageración, pero los números no mienten.

El Instituto Para la Economía y la Paz señala que la violencia y el miedo a la violencia generan importantes costos “en forma de daños a la propiedad, lesiones físicas y trauma psicológico”, alteran el comportamiento económico “al cambiar los patrones de inversión y de consumo, lo que desvía recursos públicos y privados de las actividades productivas hacia medidas de protección”, generan pérdidas significativas “en forma de déficit de productividad, pérdida de ingresos y gastos irregulares”.

Y asegura que los costos de la violencia en México son significativamente mayores que los gastos del gobierno en la contención de la violencia. En 2023, “el 19.9 por ciento del impacto económico de la violencia en México fue en gastos gubernamentales y gastos de protección privada”. El restante 80 por ciento corresponde al costo de los homicidios, delitos con violencia, crímenes de la delincuencia organizada y miedo a la violencia.

El Estado Libre y Soberano de México, la prepotente existencia moral en la que vivimos, es una de las entidades que se ubican en la parte baja de la tabla del Índice de Paz de México. Es decir, está entre los menos pacíficos del país. Colima, con una calificación de 4.742, es el más violento. Yucatán, con su 1.314, es el más pacifico. El estado de México está en el lugar 24, con una calificación de 3.446, dada por una ponderación de los homicidios, delitos con violencia, delitos cometidos con arma de fuego, crímenes de la delincuencia organizada y miedo a la violencia. Tuvo una ligera mejoría, subiendo tres escalones en el último año.

Y dos municipios mexiquenses, Ixtlahuaca y Metepec, están entre los municipios con las tasas de homicidios más bajas del país. Ixtlahuaca en el lugar 9 y Metepec en el escalón 25.

La entidad mexiquense, por cierto, tiene un costo de la violencia como porcentaje del PIB entre 15 y 19 por ciento, en sintonía con el indicador del país. Un costo alto: al menos uno de cada seis pesos que produce la economía mexiquense. Un mundo de dinero.

Director del noticiario Así Sucede de Grupo Acir Toluca. Gerente de Meganoticias Toluca.

Tips: felgonre@gmail.com. Twitter: @FelipeGlz.