Entrenamiento y alimentación aparecen como claves para que los atletas de alto rendimiento alcances sus objetivos en las diferentes competencias, sin embargo un reciente estudio revela que los trastornos alimenticios en los deportistas es mayor que en el resto de la población.
El trabajo de investigación lo llevó a cabo Current Sports Medicine Reports, el cual señala que estos trastornos plantean una complejidad única que merece atención debido a que los deportistas profesionales tienen un 45% más de probabilidades de padecer trastornos.
Por lo que toca a la media en la población en general (estadounidense) solo el 5% puede padecer algún tipo de problema relacionado con la alimentación.
Algunos de los factores que influyen en los atletas es cuando tienen que dar un determinado peso (como en el caso del boxeo), además del psicológico ya que al estar bajo los reflectores normalmente son blanco de comentarios sobre su figura corporal.
En términos de patología alimentaria los equipos de tratamiento y apoyo deben entender la gravedad de la enfermedad, además los especialistas deben recetar tratamientos alimenticios integrales para casos específicos en deportistas, señala Rachael Flatt, coautora del estudio y maestra de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill.
Los científicos detallaron algunos puntos clave que deben seguir los especialistas de la nutrición para deportistas élite, entre ellos un tratamiento hospitalario-residencial para atletas con trastornos alimenticios graves, ya que este tipo de pacientes pueden tener peso corporal bajo o una rápida pérdida de peso y suelen tener pensamientos suicidas.
Un segundo punto es la hospitalización intensiva ambulatoria o parcial, la cual es apropiada para atletas que pueden llevar un tratamiento transitorio y la tercera recomendación es la atención ambulatoria que está indicada para atletas con trastornos alimenticios de leves a moderados.