El cloro es uno de los productos de limpieza más utilizados para desinfectar el hogar o lugar de trabajo con el objetivo de evitar la presencia del Covid-19; sin embargo, mezclarlo con otros elementos como el vinagre, agua oxigenada, ácidos y alcohol no es una buena idea porque se generan otras sustancias que nos afectan.
El jabón y el alcohol son los ideales en esta contingencia por Covid-19, los jabones líquidos resultan adecuados para limpieza de manos, puertas, paredes y demás, mientras que el alcohol, aunque es muy efectivo, a largo plazo puede generar algunos problemas como dermatitis, ya que elimina la grasa de las manos y si se resecan es una entrada para otros patógenos y bacterias.
Cada producto está elaborado con ciertas especificaciones y cumplen con su función, sin necesidad de combinarlos y uno de los más utilizados es el cloro, muy eficiente para desinfectar superficies, de acuerdo a lo que dice Carlos Antonio Rius Alonso, académico de la Facultad de Química (FQ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en un artículo publicado el 13 de abril de este año.
El especialista detalla que para trapear pisos o limpiar paredes se puede usar en una solución diluida de 20 mililitros de cloro en un litro de agua y el área debe ser ventilada.
Agregó que el cloro en su estado natural es un gas, pero al comprimido se vuelve líquido; para que pueda disolverse en agua se utiliza una solución alcalina con hidróxido de sodio o sosa y se forma el hipoclorito de sodio.
Para uso en casa, el académico señaló que el hipoclorito de sodio está al cinco por ciento; sin embargo, al mezclarse con algún ácido como el limón, vinagre o productos de limpieza que contengan ácido clorhídrico se neutraliza la sosa que contiene y se genera cloro gaseoso que es muy tóxico.
Además el cloro es muy oxidante y produce quemaduras graves, paros respiratorios y afecta las mucosas de la nariz y pulmones.
El alcohol tampoco es recomendable mezclarlo con el cloro ya que da como resultado el cloroformo, el cual detiene el diafragma, músculo encargado de la respiración lo que puede provocar un paro respiratorio.
En el caso de combinar el cloro con los limpiadores que contienen amoniaco, generan grandes cantidades de cloraminas las cuales son muy tóxicas y producen problemas en el hígado y pulmón, además de ser cancerígenas.
La combinación de cloro y agua oxigenada tampoco es nada recomendable ya que forman cloratos o percloratos, que se utilizan en los explosivos.
Otra combinación no sugerida, aunque ya no está presente el cloro, es la mezcla de agua oxigenada con vinagre ya que también puede ser explosiva, pues se oxida el ácido acético y se obtiene ácido peracético, utilizado en reacciones de polimerización, que es un proceso mediante el cual las moléculas simples, iguales o diferentes reaccionan entre sí por adición o condensación y forman otras moléculas de peso doble o triple.