Toluca, México.- Los ánimos subieron de tono durante la sesión del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), luego de que el representante del partido político local Vía Radical, Daniel Antonio Vázquez Herrera, acusara violencia política en contra de su militancia por parte de su homólogo de Nueva Alianza, al señalarlo de hacerle la tarea al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Los ataques iniciaron por las declaraciones a medios de comunicación del representante de Nueva Alianza, Efrén Ortiz Álvarez, al asegurar que Vía Radical no tiene interés jurídico para impugnar a sus candidatos y que “lo están utilizando como criatura para atacar a los adversarios, lo están utilizando como prostituta política”.
Vázquez Herrera consideró que con ello se está insultando no sólo a la dirigencia sino a toda la militancia de Vía Radical que lo calificó de discurso de odio que puede desencadenar una tragedia social y puso ejemplos de ello.
Por su parte, Efrén Ortiz Álvarez reconoció su declaración y dijo que al reflexionarla, de camino a su casa, se arrepintió de haber citado a las mujeres que se dedican a la “noble” profesión más antigua del mundo; además, insistió en que en el Estado de México Nueva Alianza no tiene aliados, es adversario de todos y especialmente del PRI, con quien va en el proceso federal apoyando a un ciudadano que es José Antonio Meade y recordó que si Alfredo del Mazo Maza es gobernador fue por los votos que el partido turquesa le dio.
Isael Montoya Arce, representante del PRI, también intervino para insistir en su derecho a impugnar para mantener la legalidad en este proceso, pero recibió críticas de los demás partidos políticos que acusaron a su partido del mal gobierno y de problemas como la inseguridad y la corrupción, entre otros.
El representante de Morena, Ricardo Moreno Bastida, se dijo sorprendido de que Vía Radical se sienta agredido cuando en la elección pasada acusó a la ex candidata a gobernadora, Delfina Gómez Álvarez, a quien acusaron de malversar fondos sin podérselo probar.
Las tres rondas a que tienen derecho a ejercer para discutir un punto de la sesión fueron utilizadas para que uno a otro los partidos políticos se denostaran entre sí con argumentos actuales y de procesos electorales pasados.