Si el 40% de las mujeres desocupadas se integraran al campo laboral, el PIB de México aumentaría 43% en pocos años, aseguró Raymundo Campos-Vázquez, académico del Colegio de México.
Afirmó que hoy en día, el 55% de las mujeres no tienen trabajos remunerados, y quienes sí perciben un salario, éste es 23% menor al que obtienen los hombres.
El autor del libro “Por qué nos beneficia un país más igualitario” del Centro de Estudios Espinosa Yglesias CEEY), destacó que las mujeres tienen poca estabilidad laboral, además de realizar trabajos más precarios, aunado a que dedican más horas a quehaceres domésticos.
Según estudios del CEEY,las mujeres enfrentan barreras para generar ingresos a causa del tiempo que dedican al trabajo doméstico y de cuidados no remunerados.
“Los hombres dedican al trabajo remunerado 46 horas a la semana y las mujeres 38, pero ellas destinan 28 horas semanales a labores domésticas y de cuidado, en tanto que ellos solo 6 horas”, precisó.
Datos del ENOE 2022, del total de población excluida del mercado laboral – que tienen necesidad de trabajar, pero no están buscando empleo- 84% son mujeres y 16% son hombres. Entre las razones que dan ellas, es porque no no tienen quién cuide a sus hijos, está embarazada o no se lo permite algún familiar.
“Las opciones de movilidad social aumentan cuando existen esquemas de cuidado, como el acceso a guarderías”, destacó.
Sobre la discriminación por el tono de piel, Campos-Vázquez señaló que las personas blancas perciben ingresos 54% mayores a los tes morena.
Lo anterior, dijo, da como resultado una sobrerrepresentación de personas blancas en puestos directivos o cargos públicos de alto nivel.
“Por si fuera poco, la discriminación y los estereotipos de género contribuyen a que el 80% de las mujeres indígenas vivan en pobreza”, indicó.
Según estudios del CEEY, las mujeres tienen menos oportunidades de movilidad social, porque si nació en condiciones de pobreza, tendrá que 6% menos posibilidades que un hombre de escapar de esta situación.
En el caso de las mujeres que nacen en un hogar de mayor riqueza, ésta tendrá 14% menos probabilidades que un hombre de continuar con este estilo de vida.