Toluca, México.- En la LX Legislatura mexiquense, la cual inicia su gestión en septiembre de este año, se rompe la hegemonía del PRI en los Congresos del Estado de México.
El escenario es tan adverso para el tricolor que en un hecho inédito apenas podría tener un diputado de mayoría, cuando en las últimas siete legislaturas había tenido entre 21 y 39 diputados, al ganar la mayoría de los distritos.
Tras los cómputos distritales de los votos emitidos en la elección del primero de julio, se asignarán las diputaciones de representación proporcional, sin embargo, el PRI seguiría siendo minoría.
La historia reciente de las legislaturas mexiquenses comprende dos etapas, la primera de 1996 a 2009, cuando la oposición encabezada por el PAN y PRD logró equilibrar fuerzas en el congreso local, con lo cual el PRI perdió la mayoría.
En este periodo destaca la gestión de 2000 a 2003, cuando el tricolor no logró la mayoría legislativa en las urnas, pero logró recuperarla cuando 13 diputados panistas se hicieron independientes, quienes en las votaciones coincidían con el PRI.
A partir de 2009, el tricolor recuperó la mayoría en el Poder Legislativo, en parte ayudado por sus aliados del PVEM y Nueva Alianza.
RECUENTO
En las tres últimas legislaturas locales el tricolor se mantuvo nueve años al frente de la Junta de Coordinación Política del Estado de México, órgano responsable del manejo político y financiero del Poder Legislativo. Ahora Morena podría asumir el control entre 2018 y 2021.
Entre los años de 1996 a 2015, la Legislatura en la que el PRI obtuvo el menor número de diputados fue en 2006, justo con un efecto de Andrés Manuel López Obrador, quien fue candidato a presidente por primera ocasión.
En ese momento el tricolor tuvo 21 legisladores, contra 20 del PAN e igual número del PRD.
Desde el año 2009 a la fecha el PRI se posicionó y obtuvo 39 distritos en las LVII y LVIII Legislaturas. En la actual bajó a 34, pero para el 2018 vive un desplome histórico.
Las mayorías parlamentarias son quienes definen la política legislativa a seguir, así como las respectivas prioridades de la agenda parlamentaria, además son claves para la aprobación del presupuesto anual y de las leyes de ingresos del estado y de los municipios.
En el Estado de México dicha agenda había sido determinada de manera coordinada entre el Ejecutivo y la mayoría del PRI. Ahora el escenario podría ser distinto.
39
Diputaciones locales ganó el PRI en las LVII y LVIII Legislaturas locales.
21
Legisladores tuvo el tricolor en 2006.
