La expansión sin freno del comercio informal en Tlalnepantla, Atizapán de Zaragoza y Naucalpan, amenaza la supervivencia del sector formal de Comercio, Servicios y Turismo, mismo que sí contribuye con impuestos al crecimiento del Estado de México.
Además de que garantiza la seguridad del consumidor y proveer de seguridad social a sus empleados, advirtió Susana Diaz integrante de la Canaco-Naucalpan.
La representante del comercio establecido manifestó su preocupación por la proliferación cada vez más frecuente de modalidades de comercio informal en la vía pública de los municipios, como el ambulantaje, que ocupan de manera flagrante áreas destinadas de forma exclusiva al uso público para el tránsito peatonal o vehicular.
La flexibilidad de las autoridades a través de los permisos improvisados para ambulantes, promueve la instalación de nuevas modalidades de comercio ilegal, incluso en centros históricos de los municipios y fomenta el consumo de bienes y servicios que carecen de cualquier garantía.
Señala que este comercio informal e ilegal perjudica la sana convivencia de los ciudadanos, pone en peligro la salud y seguridad de consumidores y comerciantes, entre otras consecuencias devastadoras para el bienestar social y económico de todas y todos los mexiquenses.
En reiteradas ocasiones las Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo del Estado de México han manifestado a las autoridades municipales la necesidad de implementar estrategias eficaces contra el comercio informal, que genera una competencia desleal y merma los ingresos de millones de familias mexiquenses.
Dijo que de acuerdo al INEGI la suma de mexicanos en todas las modalidades de empleo informal alcanzó a nivel nacional más de 33.6 millones de mexicanos.
Las tasas más elevadas de informalidad laboral por entidad federativa se registran en el Estado de México, Oaxaca, Guerrero, Chiapas e Hidalgo.
Enfatizó que el comercio formal, que es el único que cumple con todas las medidas de higiene y seguridad y tributa al crecimiento económico del Estado de México no puede competir con esta inequidad favorecida por las autoridades municipales.