Pandemia de Covid-19 sacudió al sector migrante en México: académico

Contingencia sanitaria agudizó la falta de atención que vivía ese sector desde antes del coronavirus

Elizabeth Ríos | El Sol de Toluca

  · miércoles 10 de junio de 2020

Foto: cortesía | Instituto Nacional de Migración


La pandemia de Covid-19 frenó el fenómeno migratorio en México luego de que países centroamericanos y de Norteamérica cerraran fronteras al inicio de la contingencia sanitaria, sin embargo, también frenó la escasa atención que el gobierno mexicano les proporcionaba en su tránsito por el país, mencionó el profesor investigador de la escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey, Eduardo González Velázquez.

En su ponencia La Migración en Tiempos de Covid-19, el académico universitario expuso que la pandemia del nuevo coronavirus además de atrapar a miles de migrantes en México, agudizó la falta de atención que vivían los migrantes en su paso por México desde antes de la contingencia sanitaria.

En México los presupuestos municipales (de entidades fronterizas con Estados Unidos) son verdaderamente pequeños, con ese presupuesto no sólo tienen que atender a las personas que viven ahí, sino a estos migrantes que están siendo devueltos, pero también nos están llegando personas al sur de nuestro país”, explicó González Velázquez, quien mencionó que la urgencia sanitaria empeoró la atención dirigida a ese sector.

Aunado a ello, la atención que se daba a los migrantes en los albergues, comedores y casas de migrantes que hay en México ya no es la misma desde que inició la pandemia, debido a que varios cerraron a consecuencia de la emergencia sanitaria y otro porcentaje cerró sus puertas para no recibir personas “nuevas” pero continúa dando atención a los refugiados que ya tenía, sostuvo Eduardo González.

Por si fuera poco, la mayoría de los migrantes que contaban con un empleo ya lo perdieron, situación que endureció su estancia en nuestro país, declaró el profesor investigador de la escuela de Ciencias Sociales y Gobierno.

Todo este asunto del Covid ha venido a mover radicalmente el escenario que teníamos más o menos conocido y previsible dentro del flujo de migrantes centroamericanos por nuestro país, pero también de los mexicanos moviéndose hacia los Estados Unidos”, sostuvo.

Al analizar el comportamiento de los grupos migrantes en México, se identifica que hay tres grupos, con características y necesidades distintas.

Si nosotros observamos a los grupos de población migrante nos damos cuenta que son totalmente diferentes, hay unos que no alcanzaron a llegar, otros que quedaron ‘atrapados’ en nuestro territorio, y otros que fueron regresados a México por parte de Estados Unidos para esperar que tengan el asilo en ese país”, explicó.


Caída de las remesas

El pasado mes de marzo México registró un récord en el crecimiento de las remesas, al sumar más de cuatro millones de dólares, lo que representa un 35.8% más que en marzo del año pasado, según estadísticas del Banco de México (Banxico).

Sin embargo, para abril se registró una caída en las remesas recibidas en México del 28.5% al sumar únicamente dos mil 861 millones de dólares, situación que probablemente se replique en las estadísticas de mayo.

Teníamos 12 años teniendo todos los meses mayor ingreso de remesas que el mes anterior, y esto se cayó ahora en abril y probablemente se siga cayendo en mayo y quizá comience a repuntar en junio. La última cifra de la recuperación de empleos en Estados Unidos nos habla de que están ya cerca de los 2 millones de los nuevos empleos que acaban de generar”.

El académico expuso que la primera ola del desempleo a consecuencia del Covid-19 registrada en el mes de abril no golpeó a los migrantes, sin embargo, para esta fecha casi la totalidad de este sector se encuentra en condiciones de desempleo.

Lo que estamos viendo es que cuando las condiciones de Estados Unidos son más complicadas, es cuando más suben las remesas, porque los migrantes buscan enviar la mayor cantidad de recursos que les permitan hacerse de un negocio o una casa propia ante el riesgo de ser deportados”, indicó Eduardo González.

Para concluir destacó que si la caída en las remesas continúa en picada en lo que resta del año, para regresar a los niveles que se obtuvieron en 2019 (casi 40 mil millones de dólares), tendrían que pasar aproximadamente ocho años, según expertos financieros.