Aunque los días más fríos que trajo diciembre ya pasaron, el invierno aún está a la mitad de su ciclo y las escuelas que se ubican a las faldas del volcán Xinantécatl, en el municipio de Zinacantepec, tuvieron que reabrir este lunes.
"Ahorita ya no se siente tanto, ya pasó lo más duro en vacaciones, eso fue lo bueno", explica uno de los docentes que atiende primaria en la comunidad de Loma Alta.
Este lunes amaneció con casi 5 grados y para ellos, las familias que habitan a las faldas del volcán Xinantécatl, fue como una mañana primaveral. Porque en diciembre les nevó y el frío duró así una semana.
"Los niños ya están acostumbrados, sí sienten el frío pero no tanto como cuando cae la nieve", aseguran los vecinos.
“Pintamos en vacaciones y estaba muy sucio, por eso no hubo clases”, comentaron las madres de familias que se sumaron a la limpieza en la escuela Benito Juárez que atiende el Consejo Nacional de Fomento Educativo en El Capulín.
“Ahorita no hace frío”, coincide el grupo de mujeres, quienes echan agua casi congelada al mobiliario y al piso de las aulas.
Para ellos el frío es como el polvo o el viento. Y sentir frío allí en El Capulín, es cuando el agua de las tuberías amanece congelada y la deben “varear” para que salga el chorro.
“Cuando hace frío el agua se congela en la manguera y hasta los animalitos lo sienten”, dice el grupo de campesinas.
Aunque la mayoría de las escuelas cuenta con instalaciones edificadas de concreto, se carece de calefacción y se debe suplir con cortinas y ropa abrigadora.
“No hay protocolos especiales, solo soportar el frío, les pedimos que vengan abrigados, si pueden con gorros y guantes, pero los niños resisten”, explicó otro de los docentes, quien viajan desde Toluca hasta la zona alta a dar clases.
En el caso de los docentes del Conafe su situación es más especial, pues deben de hospedarse toda la semana en la comunidad donde prestan sus servicios porque el programa así lo marca.
“Aquí se quedan los maestros y ellos resisten el frío igual que nosotros”, comentaron las mujeres de El Capulín.
Al igual que en todo el país, en esta zona del valle de Toluca se debió retornar a clases a partir de este lunes. Pero allí, a las faldas del volcán Xinantécatl, es especial el retorno, porque se debe asistir a unas aulas que están a más de 2 mil 500 metros sobre el nivel del mar y resistir frío polar día y noche.
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