Toluca, México.- La decisión de realizar un proceso de elección de la nueva dirigencia estatal del PRI, para concluir el periodo 2015- 2019, en un solo día y sin tomar en cuenta a la militancia habla de que ese partido no ha entendido los mensajes del primero de julio, ni la necesidad de democratizarse, advirtió el presidente del Grupo Político Estado de México, Cuauhtémoc García Ortega.
En entrevista reprochó que la convocatoria emitida en fin de semana y en día inhábil está llena de candados para que ningún militante se registre porque es prácticamente imposible reunir todos los requisitos y evidentemente apuestan a una candidatura única.
El viernes Ernesto Nemer renunció a la dirigencia estatal del PRI y el sábado ese partido emitió la convocatoria para renovar presidente y secretario general. El registro y elección son este martes 23 de octubre.
García Ortega advirtió que lamentablemente si no se entiende que el PRI debe regresar a la militancia y terminar con las imposiciones pasará de estar en terapia intensiva a ser enterrado.
Llamó a la dirigencia nacional a darse cuenta de que el PRI mexiquense está lleno de cadáveres políticos, por lo cual pidió no cerrar los ojos, ni lo oídos al clamor de los militantes.
Reprochó que su partido actúe como si el primero de julio no hubiera vivido la casi desaparición de esa fuerza política por las prácticas de los mismos personajes, pues todo indica que no han querido escuchar a la militancia, la cual ha pedido que regrese la vida democrática al PRI. “No se entendió la lección”, sostuvo.
Desde su punto de vista, quienes dirigen al PRI tienen miedo de democratizarlo, pese a que es la única solución que tienen para lograr la reconciliación con la militancia, pues de lo contrario, corren el riesgo de desaparecer.
Insistió en que la convocatoria está llena de candados y sin tiempo para cubrir todos los requisitos, con el fin de que llegue una fórmula única a registrarse, en una elección no abierta donde votarán los consejeros que ya han recibido la instrucción del más alto nivel para imponer la voluntad de la dirigencia nacional, relegando a la militancia.
“Si el PRI no cuida lo poco que tiene, no será competitivo para las próximas elecciones. La paciencia de la militancia se acabó”, sostuvo.
