La Ciudad deMéxico y el país no enfrentan una crisis de consumo de marihuana,ya que las cifras indican que solamente 7% de los estudiantesasegura fumarla, pero un 93% niegan consumirla, puntualizó RosarioTapia, directora general del Instituto para la Prevención de lasAdicciones (IAPA) en la capital.
Sin embargo, llamó a no bajar laguardia porque a los narcomenudistas no les falta creatividad paraseguir con la oferta de drogas a escondidas y generar una adicciónentre los jóvenes.
Durante una entrevista conEL SOL DEMEXICO, aseguró que las tareaspreventivas sí han dado resultados, de lo contrario, elcrecimiento del consumo del enervante hubiera sido del 2% y no el1, que es actualmente.
“Siempre vamos a tener estatendencia al crecimiento, porque la oferta es enorme, al igual quela gama de posibilidades que ellos (los narcomenudistas) inventanpara acercar la droga. Si nosotros no hiciéramos nuestro trabajo,la situación sería peor”, recalcó Tapia Medina.
Al hablar sobre la venta depastelillos de marihuana, la funcionaria comentó que el IAPA sabede eso solamente por referencias y que se ofrecen a las afueras delos planteles de educación media superior y no cerca de lasescuelas primarias y secundarias.
Comentó que las metanfetaminas,drogas sintéticas y “el éxtasis” también se venden enpresentaciones escondidas a los jóvenes.
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Expuso que a los alumnos de dichosniveles los papás son los que les compran los productos chatarra,los progenitores son los que siempre pagan.
Manifestó especialmente supreocupación por las presentaciones diferentes para atrapar a unapoblación vulnerable y es que los narcomenudistas no tienenninguna conciencia de nada en lo más mínimo.
La directora del IAPA subrayó quelos menores de edad es la población más vulnerable, porque sucerebro no está desarrollado al máximo, lo cual concluye a los 26años.
Mencionó que las personas queempiezan a consumir en la adolescencia, tienen un 15% más deriesgo de llegar a adicción, por la influencia que tienen de lasustancia en esa etapa de transición.
Reconoció que en la últimaencuesta de las adicciones, efectuada en 2014, se informó que elconsumo aumentó en un punto porcentual a nivel nacional, de 6.6 a7.6%.
“A nosotros nos toca trabajar enesta etapa de que los jóvenes no consuman. La oferta ahí está yalguien tiene que combatir, desde el Ejército, la Marina, laProcuraduría General de Justicia. Yo le haría un llamado a todaslas autoridades de seguridad de que mantenga y fortalezcan sutrabajo de investigación, para poder detectar y actualizarse entodas las presentaciones. Ahora son panques y al rato no sabemosqué va ser”, manifestó Tapia Medina.
A pesar de que los menores son lapoblación objetivo de los vendedores de drogas, la directora delIAPA se opuso a aplicar el operativo “mochila segura” paraprevenir el consumo de estupefacientes.
Opinó que eso es muy violento,violatorio de los derechos, “muy agresivo” para los jóvenes,porque eso sería contraproducente, por lo que insistió orientarlos esfuerzos a trabajar con los padres de familia y los maestrospara apoyar a los jóvenes.
Explicó que cualquier cosa sepreviene desde casa, ese es un punto fundamental y advierte: si lospadres no atienden las necesidades de sus hijos, no los escuchan ysi tienen una distancia permanente con ellos, no deslindarse de suresponsabilidad.
Recordó que lamentablemente habajado la percepción de consumo de marihuana por todo este grandebate nacional e internacionalización y la legalización delconsumo y la parte medicinal.
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La funcionaria agregó que eslamentable que se piense que no hace daño, mientras nosotrosestamos trabajando contra esa percepción. “A la larga se veránlos efectos que tienen los consumidores asiduos”.
Insistió en asegurar que no hay unacrisis en el consumo de la marihuana, porque si los niveles fuerande un 40% entonces si sería preocupante y mencionó que “elconsumo de alcohol y tabaco es el del 30 por ciento, lo cual si esinquietante”.
Por otro lado, datos del estudioPanorama Actual del Consumo de sustancias en Estudiantes de laCiudad de México 2015, efectuado por el Instituto Nacional dePsiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz (INP), la AdministraciónFederal de Servicios Educativos en el Distrito Federal (AFSE) y elIAPA, indica que en el caso del alcohol, el consumo pasó del 11.6%en secundaria a 30.7% en bachillerato, el de tabaco pasa de 8% a30.8%; mientras que en el caso de las drogas ilegales el consumo demarihuana pasa de 4.3% a 11.1%.
