WASHINGTON, DC. Los agentes fronterizos de Estados Unidos arrestaron en julio a un 8% menos de personas en el límite suroeste del país comparado con junio, pero el número de familias migrantes detenidas se mantuvo casi constante, según cifras divulgadas por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
La caída fue la segunda de manera consecutiva y de acuerdo con la dependencia, fue consecuencia de la política de cero tolerancia implementada por la administración del presidente Donald Trump, y bajo la cual el gobierno federal criminaliza ahora a los inmigrantes indocumentados arrestados en la frontera.
Un total de 31 mil 303 personas fueron arrestadas en la frontera de EU con México el mes pasado, comparado con 34 mil 095 en junio. De los detenidos por intentar ingresar ilegalmente a territorio estadounidense, alrededor de cuatro mil eran niños que cruzaron la frontera desde México, desde unos cinco mil 100 en junio.
Alrededor de nueve mil 300 "unidades familiares" fueron arrestadas, según los datos, casi sin cambios desde las nueve mil 400 un mes antes.
"Esto muestra que cuando hay consecuencias reales por violar la ley, la conducta de aquellos que piensan en cometer delitos cambia", dijo el portavoz del Departamento de Seguridad Nacional Tyler Houlton en un comunicado.
Pero las fluctuaciones mes a mes en las detenciones en la frontera son típicas. En todos los años desde 2006, excepto en 2017, los arrestos en julio han sido inferiores a los de junio, según datos oficiales. La ONG Migration Policy Institute dijo que la tendencia de los cruces fronterizos este año es similar a los períodos durante la administración Obama. "No hay evidencia de que ningún cambio de política haya afectado significativamente el patrón estacional de capturas en los últimos meses", afirmó.
Ayer, el fiscal general de California, Xavier Becerra, solicitó al gobierno federal que entregue información sobre la planeación de la política de tolerancia cero.
