/ domingo 10 de enero de 2021

El Tintero de las Musas | Brigitta Anguiano es la mejor crítica de su marido

El estudio de Anguiano sigue tal cual, pero con más obra. El de Brigitta, arriba, está por el momento en proceso de orden. Mi carrera, no es tan importante. Mi padre siempre decía: no atrás de ni enfrente, al lado. En nuestra cultura, es así: la mujer al lado del hombre. Raúl me lleva 20 años. Mi papá sólo le llevaba cinco. Y lo adoraba.

Vuelve a vivir: Regresé a Letonia de nuevo en 1995. Pude entonces llevar a mis hijos Mark y Linda. También a mi hermana. Hicieron una bella película sobre nosotros y nuestros recuerdos, la cual, a petición popular se repitió varias veces en la televisión.

El mío es un país bello y sufrido, pero somos fuertes. Hemos estado sometidos a muchas naciones. Y ahora, de nuevo, estamos ¡libres!

Cincuenta y tres años lejos... uno piensa que son países tan distintos, Letonia y México y, sin embargo, hay costumbres y arte monumental en ambos; yo creo que básicamente tienen parecido.

Tú no hables de política, le decía siempre Raúl. Ni se te ocurra. Pero hoy en día ya se atreve a hablar con altos políticos de México.

¿Mi vida con Raúl? Hemos trabajado muy duro. He hecho que su vida sea mucho más fácil. Desde los pinceles que lavo, hasta cargar todo lo que él quiera, para que no se lastime y para que pinte lo que él quiera. Pero desde hace 30 años.

Brigita recapacita y con su español alborotado, dice:

He hecho su vida lo más fácil que he podido. Haciendo yo misma lo que está a mi alcance. Desde que lo conozco, al despertar todas las mañanas ha encontrado su té de manzanilla. Ni siquiera conoce la cocina. Se quemaría los dedos. Siempre ha encontrado todo servido al momento.

Mi signo zodiacal es cáncer. Soy de julio. Me gusta atacar de frente e inmediatamente. Nací el 21 de julio. Raúl no es así, le gusta estarle dando vueltas a todo.

Nunca me quito la edad. Es estúpido. Prefiero estar saludable y viva, en lugar de ser una muerta bellísima. Me cuido de las cosas que están en mis manos. Platica entonces de una amiga entrañable, que cuidó lo de afuera y descuidó lo de adentro.

¿Que si me tienen envidia las mujeres? No lo sé. Hace 30 años he visto a Raúl rodeado de modelos. Él, estando feliz, ha sido fiel. El amor no es algo que pase y ya lo tienes asegurado de por vida. Lo tienes que trabajar a diario.

Tengo mi lado romántico. Me gusta regresar al pasado. Revivir los momentos felices. Volver a los lugares íntimos, los restaurantes. Así, mi amor ha durado todo este tiempo. El amor es muchos aspectos, no sólo la pasión que se va. No sólo lo físico.

(Continuará)

gildamh@hotmail.com

El estudio de Anguiano sigue tal cual, pero con más obra. El de Brigitta, arriba, está por el momento en proceso de orden. Mi carrera, no es tan importante. Mi padre siempre decía: no atrás de ni enfrente, al lado. En nuestra cultura, es así: la mujer al lado del hombre. Raúl me lleva 20 años. Mi papá sólo le llevaba cinco. Y lo adoraba.

Vuelve a vivir: Regresé a Letonia de nuevo en 1995. Pude entonces llevar a mis hijos Mark y Linda. También a mi hermana. Hicieron una bella película sobre nosotros y nuestros recuerdos, la cual, a petición popular se repitió varias veces en la televisión.

El mío es un país bello y sufrido, pero somos fuertes. Hemos estado sometidos a muchas naciones. Y ahora, de nuevo, estamos ¡libres!

Cincuenta y tres años lejos... uno piensa que son países tan distintos, Letonia y México y, sin embargo, hay costumbres y arte monumental en ambos; yo creo que básicamente tienen parecido.

Tú no hables de política, le decía siempre Raúl. Ni se te ocurra. Pero hoy en día ya se atreve a hablar con altos políticos de México.

¿Mi vida con Raúl? Hemos trabajado muy duro. He hecho que su vida sea mucho más fácil. Desde los pinceles que lavo, hasta cargar todo lo que él quiera, para que no se lastime y para que pinte lo que él quiera. Pero desde hace 30 años.

Brigita recapacita y con su español alborotado, dice:

He hecho su vida lo más fácil que he podido. Haciendo yo misma lo que está a mi alcance. Desde que lo conozco, al despertar todas las mañanas ha encontrado su té de manzanilla. Ni siquiera conoce la cocina. Se quemaría los dedos. Siempre ha encontrado todo servido al momento.

Mi signo zodiacal es cáncer. Soy de julio. Me gusta atacar de frente e inmediatamente. Nací el 21 de julio. Raúl no es así, le gusta estarle dando vueltas a todo.

Nunca me quito la edad. Es estúpido. Prefiero estar saludable y viva, en lugar de ser una muerta bellísima. Me cuido de las cosas que están en mis manos. Platica entonces de una amiga entrañable, que cuidó lo de afuera y descuidó lo de adentro.

¿Que si me tienen envidia las mujeres? No lo sé. Hace 30 años he visto a Raúl rodeado de modelos. Él, estando feliz, ha sido fiel. El amor no es algo que pase y ya lo tienes asegurado de por vida. Lo tienes que trabajar a diario.

Tengo mi lado romántico. Me gusta regresar al pasado. Revivir los momentos felices. Volver a los lugares íntimos, los restaurantes. Así, mi amor ha durado todo este tiempo. El amor es muchos aspectos, no sólo la pasión que se va. No sólo lo físico.

(Continuará)

gildamh@hotmail.com