/ martes 7 de abril de 2020

Nuestro México | Basura y Coronavirus

Además de medidas de confinamiento en los hogares, distancia de un metro hacia otras personas, lavado frecuente de manos, entre otras, una medida que puede ayudar a disminuir los contagios sería que en Toluca y en los municipios que todavía no lo han establecido, la recogida de basura se realice sin que los ciudadanos tengamos que esperar que el camión acuda a nuestra cuadra, correr hacia donde está, hacer fila y entregar en propia mano la basura a los señores encargados.

La forma tradicional, no solo en el sentido de que “así se ha hecho”, sino de considerar que siempre alguien, en general las mujeres, están en la casa y el camión puede pasar a cualquier día y hora, es algo superado en países desarrollados y en México en estados como Querétaro y Yucatán, considerados además como los estados con las ciudades más limpias del país.

En la situación actual de crisis por coronavirus, el hacer la fila y entregar la basura en la mano a los encargados ya es una posibilidad de exposición y contagio. Esta sería, por lo tanto, una buena oportunidad para que los ayuntamientos revisen cuáles de los servicios públicos se deben adaptar a la situación y propiciar un cambio que proteja a la ciudadanía por el momento y deje para después un servicio más moderno.

El servicio de recogida domiciliaria consiste en que el gobierno municipal establezca días y horarios para la recogida de la basura, según las zonas de la ciudad. Idelamente esos días están relacionados con el tipo de desecho, orgánico o inorgánico, cosas encumbrantes, etcétera. Estos horarios son establecidos generalmente por las noches, lo cual tiene mucha lógica pues es la hora del día en que hace menos calor y, aún si el servicio se retrasara, no habría posibilidad de contaminar.

De este modo, los ciudadanos sacan su basura, de forma organizada y la dejan en la banqueta de su casa, con la confianza que el camión municipal pasará y los recolectores se la llevarán. Los señores que la recolectan cumplen una función esencial de limpieza pues además de llevarse la basura domiciliaria, van recogiendo otras basuras que van encontrando.

Esta modalidad, además de mejorar la imagen urbana, aumenta la cobertura de población y viviendas atendidas, moderniza la recolección de residuos sólidos, permitiendo, en el caso de municipios como Toluca, emprender acciones de coordinación en la zona conurbada para que otros municipios se sumen a esta tarea.

La situación actual requiere de la creatividad de las administraciones municipales para facilitar el confinamiento de las personas, pero es también una oportunidad para cambiar prácticas arcaicas, como correr atrás del camión de la basura para poder tirarla, en espacios que como nuestro municipio está en continua transformación y necesita servicios de calidad, sustentables y socialmente incluyentes.

Profesora-Investigadora El Colegio Mexiquense, A.C.

Comprometida con la trasparencia y rendición de cuentas

Aficionada a la literatura y a la historia

Twiter @CadenaInostroza


Además de medidas de confinamiento en los hogares, distancia de un metro hacia otras personas, lavado frecuente de manos, entre otras, una medida que puede ayudar a disminuir los contagios sería que en Toluca y en los municipios que todavía no lo han establecido, la recogida de basura se realice sin que los ciudadanos tengamos que esperar que el camión acuda a nuestra cuadra, correr hacia donde está, hacer fila y entregar en propia mano la basura a los señores encargados.

La forma tradicional, no solo en el sentido de que “así se ha hecho”, sino de considerar que siempre alguien, en general las mujeres, están en la casa y el camión puede pasar a cualquier día y hora, es algo superado en países desarrollados y en México en estados como Querétaro y Yucatán, considerados además como los estados con las ciudades más limpias del país.

En la situación actual de crisis por coronavirus, el hacer la fila y entregar la basura en la mano a los encargados ya es una posibilidad de exposición y contagio. Esta sería, por lo tanto, una buena oportunidad para que los ayuntamientos revisen cuáles de los servicios públicos se deben adaptar a la situación y propiciar un cambio que proteja a la ciudadanía por el momento y deje para después un servicio más moderno.

El servicio de recogida domiciliaria consiste en que el gobierno municipal establezca días y horarios para la recogida de la basura, según las zonas de la ciudad. Idelamente esos días están relacionados con el tipo de desecho, orgánico o inorgánico, cosas encumbrantes, etcétera. Estos horarios son establecidos generalmente por las noches, lo cual tiene mucha lógica pues es la hora del día en que hace menos calor y, aún si el servicio se retrasara, no habría posibilidad de contaminar.

De este modo, los ciudadanos sacan su basura, de forma organizada y la dejan en la banqueta de su casa, con la confianza que el camión municipal pasará y los recolectores se la llevarán. Los señores que la recolectan cumplen una función esencial de limpieza pues además de llevarse la basura domiciliaria, van recogiendo otras basuras que van encontrando.

Esta modalidad, además de mejorar la imagen urbana, aumenta la cobertura de población y viviendas atendidas, moderniza la recolección de residuos sólidos, permitiendo, en el caso de municipios como Toluca, emprender acciones de coordinación en la zona conurbada para que otros municipios se sumen a esta tarea.

La situación actual requiere de la creatividad de las administraciones municipales para facilitar el confinamiento de las personas, pero es también una oportunidad para cambiar prácticas arcaicas, como correr atrás del camión de la basura para poder tirarla, en espacios que como nuestro municipio está en continua transformación y necesita servicios de calidad, sustentables y socialmente incluyentes.

Profesora-Investigadora El Colegio Mexiquense, A.C.

Comprometida con la trasparencia y rendición de cuentas

Aficionada a la literatura y a la historia

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