El crecimiento acelerado de la población en todo el mundo, que se prevé alcance la cifra de 10 mil millones de personas en el año 2050; así como la sobreexplotación de los acuíferos; la contaminación y el cambio climático, y las luchas por el dominio de los recursos naturales, son factores que han provocado una disminución de los recursos hídricos del planeta.
Este lunes 22 de marzo se conmemora el Día Mundial del Agua, proclamado así por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, en 1992, y el periodo de 2018 a 2028 ha sido designado el decenio “Agua para el Desarrollo Sostenible”, considerando al “vital líquido” como elemento sustancial para el desarrollo de la humanidad y la paz mundial.
En 2004, el Estado de México fue sede del encuentro internacional de “Metrópolis”, organizado por la Asociación Mundial de Grandes Metrópolis, donde uno de los temas fue el relacionado con el agua y se le definió como “asunto de seguridad nacional”, por ser un recurso estratégico para “garantizar y fortalecer la gobernabilidad de las ciudades”.
A casi dos décadas de distancia, los problemas relacionados con el agua en el mundo no sólo no se han resuelto, sino que se han agravado. Más de un tercio de la población mundial -aproximadamente 2 mil 600 millones de personas- carece de servicios de agua potable, y quienes viven en condiciones de pobreza extrema no gozan de este recurso.
Con motivo del Día Mundial del Agua, aparecerá información sobre sus condiciones en el planeta, las carencias que existen y los desafíos que se han planteado para su preservación… y nada más; porque el cuidado de un recurso fundamental para la vida no está permanentemente en la discusión pública y ni siquiera en el proceso electoral para renovar -en el caso del Estado de México- ayuntamientos, así como diputaciones locales y federales.
En la entidad, la Comisión Legislativa de Recursos Hidráulicos del congreso estatal analiza la iniciativa del diputado, José Antonio García García, del Partido Acción Nacional, que propone elevar hasta en 40 por ciento las multas por el dispendio y descuido en el uso de este recurso, consideradas en la Ley del Agua del Estado de México. Eso significaría multas de entre mil 700 y hasta 60 mil 800 pesos por desperdiciar agua o contaminarla.
Habrá que ver hasta dónde se concreta esa iniciativa y también sería sano observar más campañas de comunicación que nos permitan hacer conciencia sobre el cuidado del agua, sobre todo cuando lavarse las manos puede ser un tema -literal- de vida o muerte ante el Covid-19.
PERCEPCIÓN
Será interesante analizar las plataformas de los partidos políticos para saber qué acciones proponen para preservar el agua.
