En medio de la pandemia del Covid-19 los animales de compañía han ocupado un lugar importante dentro de la familia ya que se traduce en la disminución de sentimientos de soledad, depresión, disminuye el estrés y aumentan el sentimiento de felicidad, por lo que es algo positivo para la salud mental.
De acuerdo a datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 82% de los hogares mexicanos tiene una mascota y según cifras de Statista el 53% de los encuestados considera una importante ventaja la relación afectiva con la mascota y el 35% lo considera algo positivo.
Además tener una mascota incrementa el sentido de responsabilidad, aumenta la vida social y se incrementa la actividad física, en el caso de los niños representa una oportunidad para aprender cómo tratar a los animales y el nivel de compromiso.
El IMSS destaca la necesidad de no ver a las mascotas como un juego y pide estar consciente de las necesidades específicas de los animales que se adoptan, además de la alimentación contar con espacios adecuados para la sana convivencia, así como los gastos que implica su cuidado y la atención con el veterinario.
Los adultos mayores también se ven beneficiados al adoptar una mascota ya que ayudan a mejorar el ánimo, aunque también es importante elegir una que se adapte al estilo de vida de la persona, de acuerdo a la American Association of Research Persons.
Por lo tanto la interacción a cualquier edad con animales, puede disminuir los niveles de cortisol o la llamada hormona del estrés, también reducir la agresividad, por el contacto y caricias ayudan a regular la tensión arterial y la frecuencia cardiaca.
En algunos casos de niños con alteraciones en el desarrollo como autismo o déficit de atención con hiperactividad, las mascotas pueden influir positivamente, mejoran el sistema inmunológico e incluso pueden detectar ciertas enfermedades en sus dueños como diabetes y epilepsia.